¿Conocen a Mario? Lógicamente no. Se lo presento: Mario es un estudiante de periodismo que   ejerce de socorrista en la piscina que frecuento en verano, tan simpático en el trato como responsable en su trabajo. Un diez de chico.  
Algo en su comportamiento me llamó la atención el jueves de la semana pasada. Y es que, según íbamos entrando los fijos de la piscina, Mario nos iba comentando que daban lluvias para el fin de semana. Me extrañó tanto interés por el Meteosat en un veinteañero, pero todo tenía una explicación:  precisamente ese jueves se cumplían dos años de una DANA que se llevó por delante su casa. Desde entonces, cada vez que llegan estas fechas o cada vez que oye las palabras 'gota fría' o 'DANA', Mario mira al cielo con preocupación y escudriña en internet para saber el agua que va a caer.
En un momento de poca afluencia de bañistas, Mario me explicó su situación. ¿Recuerdan un vídeo que se hizo viral en redes sociales hace dos años de un chico gritando desde la terraza de su casa mientras el agua tiraba el muro de su patio y arrastraba con ella todo lo que encontraba a su paso? Fue en Cobisa hace dos años y el chico que gritaba era él, lleno de miedo, rabia y precaución.
Viendo la que estaba cayendo, el domingo le mandé un whatsapp preguntando qué tal se encontraba y, al momento, me respondió con una videollamada.  Visiblemente nervioso, me enseñaba la calle y me decía: «mira, mira, esa es mi calle y esa es la casa de mi vecino, sin muro, se ha comido el muro, ¿otra vez? ¿cómo es esto posible? ¡Otra vez?… te dejo, voy al sótano a poner cosas…». Y me colgó.
Lo que pude ver en esa videollamada fue una calle llena de agua. Una imagen igual a las muchas que han recibido ustedes estos días en sus teléfonos de calles llenas de agua en Cobisa, Escalona, Toledo capital, Illescas… Pero yo me quedo con la pregunta que hacía el bueno de Mario en la desesperación: ¿Cómo es esto posible?
Lo de ayer se llama Depresión Aislada en Niveles Altos, más conocida como DANA, y desde el viernes la Agencia Estatal de Meteorología nos venía avisando de su llegada y de su peligro. Mario un día antes. No soy una experta, pero me consta que gotas frías en septiembre siempre hubo, pero, y es un pero muy importante, las había en el Levante. Ahora, para disgusto de todos en general y de Mario en particular, las tenemos también aquí.
¿Algo está cambiando en el clima? Por supuesto que sí. Que, como ya he dicho, no soy una experta. Lo que sí soy es muy curiosa y sí leo a expertos. Expertos que nos dicen que estas DANA nos llegan por el aumento de la temperatura en el Mediterráneo. Pueden producirse durante cualquier mes del año, pero son mucho más probables al final del verano. Así que, señores alcaldes de la zona centro, vayan preparándose, y no es broma. Todo apunta a que tendremos que estar más que preparados para estas gotas frías que antes veíamos en la tele con nerviosismo y empatía hacía las gentes de Gandía, porque ahora la tenemos aquí. Bien lo sabe Mario.
Toca mantener los sistemas de desagüe limpios, los cauces de los arroyos preparados, las instalaciones municipales adecuadas  al clima-no se pueden inundar todos los años los mismos pabellones-, ver qué pasa en esos tramos de carreteras que siempre están dando problemas… Una vez es una desgracia, dos veces es un aviso… y tres sería una negligencia. Se verá.