Pilar Gil Adrados

Entre Encinas

Pilar Gil Adrados


Chat GPT y la teorización humana

20/07/2023

La digitalización, la automatización de los procesos y la inteligencia artificial son consustanciales a la evolución tecnológica de nuestro tiempo que va de la mano del aumento exponencial de datos disponibles sobre infinidad de asuntos, de la capacidad de los dispositivos para recibir yalmacenar información y, por supuesto, de poder contar con técnicas cada vez más sofisticadas que procesen datos e información, generando resultados y conocimiento útil.
Qué el mundo, la sociedad y sus instituciones están progresivamente transformando suorganización y reglas de funcionamiento a causa de ello, es, a todas luces, una obviedad más. Así, por ejemplo, a pesar de las objeciones y reparos de muchos - como los guionistas de Hollywood que ven peligrar su trabajo, al mismo tiempo que la creatividad humana, debido a su uso indiscriminado por las plataformas de streaming-, vemos cómo avanza imparable el ChatGPT por las esferas de la realidad práctica actual, más allá del infoentretenimiento.
Un chat, desarrollado por la empresa Open AI en base al modelo de lenguaje por inteligencia artificial GPT-3.5, que integra más de 175 millones de parámetros y que ha sido entrenado a base de texto para, manteniendo conversaciones casi convencionales, ofrecer respuestas completas y documentadas relacionadas con el lenguaje.
Recientemente, puesto que ya hay versiones comerciales del chat que permiten el empleo de información privada o confidencial, alguna entidad bancaria lo ha incorporado como herramienta tecnológica, que le permite aprovechar modelos de inteligencia artificial avanzados con servicios empresariales y mejorar la eficiencia de sus procedimientos internos, ya que facilita comparar documentos, analizar escritos, redactar comunicaciones internas, traducir amplios textos o resumir interminables dosieres.
Por razones parecidas, universidades, que podrían mostrarse recelosas y reticentes ante el posible plagio académico, promueven su uso entre sus alumnos y docentes, facilitándoles guías de uso, con la finalidad de que esta herramienta de inteligencia artificial les sirva de ayuda en la preparación de asignaturas o en la elaboración de trabajos.
Sin embargo, no sería conveniente dejar de contrastar los resultados y confiar, sin más, en que sea correcta y carezca de sesgo el procesado de la información que nos ofrece, tras consultarle, puesto que, siendo inteligente, aún le falta para alcanzar a la inteligencia humana saber diferenciar la verdad de lo que parece cierto. Quizás porque carece de la intuición que le sirve al ser humano, además de su capacidad analítica deductiva, para percibir lo que le rodea y buscar la mejor manera de actuar para resolver problemas o abordar asuntos.
El problema no lo crea la tecnología, sino su usuario y, tal vez, la mayoría somos individuos inmersos en una cultura dispersa, acosados y asediados por mensajes, noticias, novedades y primicias que circulan sin orden ni concierto que permita su clasificación para estructurar el pensamiento y teorizar.
Teorizando, los humanos nos preguntamos, tratamos -y hasta logramos- conocer por qué las cosas son de una manera determinada y no de otra y eso requiere imaginación, creatividad, flexibilidad de pensamiento y dejarse llevar por las intuiciones.