Alejandro Bermúdez

Con los pies en el suelo

Alejandro Bermúdez


Quien no te conozca que te compre

30/06/2023

Con una cara como el cemento armado y expresión para enamorar adolescentes, se está presentando Pedro Sánchez ante el electorado para pedir nuevamente su voto. El pobre inocente no ha mentido, no se ha aliado con Bildu, no ha 'campeado' con Ezquerra Republicana. Por supuesto, en su consejo de ministros, no se ha sentado nadie de Podemos, ni ha emporcado la fiscalía nombrando a una exministra, ni mucho menos ha manipulado el Tribunal Constitucional, ni ha puesto en suerte a los presos de ETA para que el PNV los abra las puertas de las celdas. Desde luego, ha endurecido las penas a los corruptos, de tal forma que los independentistas han tenido que pagar hasta el último euro gastado en organizar el golpe de estado. Tampoco nadie le puede haber visto usar el Falcon para pasearse yendo a un concierto.
Todas estas acusaciones son inventos de los cenáculos, donde se fuman puros y se conspira contra el progreso del pueblo que prospera dirigido por su sabia batuta. Y lo dice sin ruborizarse y además tiene la osadía de comparase con Adolfo Suárez y Felipe González ¡nada menos! Presume hasta de la gestión de la pandemia, como si sus estados de excepción no hubieran sido declarados inconstitucionales… Claro, cuando esto ocurrió todavía no había podido colocar a sus amigos en el Tribunal Constitucional ¡A ver si ahora le declaran inconstitucional una sola coma con su fiel Conde Pumpido!
En su mandato todo el mundo ha podido comprobar que se ha acabado la ocupación ilegal de viviendas, que no se ha destapado ni un solo caso de corrupción (la del tío Berni es la excepción que confirma la regla). La administración funciona como un reloj desde que inventaron la cita previa, hasta el punto de que se han suprimido esas colas tercermundistas que había en otros tiempos cuando los ciudadanos, sin encomendarse ni a dios ni al diablo se presentaban en cualquier momento a solicitar su pensión. Ahora hay orden, claridad y limpieza en cualquier despacho y oficina pública que visites. Sobre todo, la administración de justicia, que es un modelo de orden. En ningún lugar como en esta administración se guarda un orden riguroso para declararse en huelga. Primero los letrados de la administración de justicia, que ni siquiera supieron mantener la jerarquía y se declararon en huelga antes que los jueces. Más tarde, cuando casi se había desempolvado un legado, amenazaron los jueces con el paro, y terminada su reivindicación, ahora es el personal sin lustre, esos que ocupan puestos menores, los que están en paros reivindicativos. Lógicamente el gobierno no se ha reunido con ellos ni piensa hacerlo, pero ¿quiénes se creen que son? La ventaja es que ahora, desde que tenemos una justicia telemática, ya no se acumulan los expedientes. Pensándolo bien, ¿para qué sirve la administración de justicia?
Pero la mayor victoria, la que recordarán los siglos venideros, fue la batalla librada contra Franco. Por fin Pedro Sánchez pudo ofrecer a sus hinchas lo que se les venía resistiendo durante décadas.
Esta es la España que ahora nos quiere vender Pedro Sánchez. Pero quizá el día 23 de julio, cuando los electores vayan a votar, digan delante de su papeleta, como le dijo el tío Cándido de Valera al burro: quien no te conozca que te compre…