Enrique Sánchez Lubián

En el Camino

Enrique Sánchez Lubián


Ni una papeleta menos

20/07/2023

«España, sepultada bajo una ola cada día más poderosa de desgobierno, de injusticia, de inmoralidad y de anarquía, no sólo está próxima a su disgregación, a su ruina económica, a su desprestigio internacional, al sonrojo de ver borrado su nombre del cuadro de las naciones civilizadas, sino lo que es peor aún, a la situación de miseria moral en que caen los pueblos, cuando conscientes de la gravedad de sus males, se confiesan, por egoísmo o por cobardía, impotentes para remediarlos».
Aunque lo parezca, no he copiado esto de un editorial contra Pedro Sánchez, ni de una soflama mitinera de Feijóo o Abascal, sino de un documento difundido por los golpistas de 1936 poco antes de sublevarse el 18 de julio. Las similitudes de alguno de sus argumentos con los que desde hace tiempo escuchamos en boca de quienes su única propuesta electoral es la derogación del 'sanchismo' son evidentes. Y aterran, porque en su inquina contra el gobierno de coalición, no han regateado esfuerzos en conjugar toda clase de  mentiras, bulos e infamias, de plató en plató, tensionando el debate público y esperando conseguir un buen rédito electoral.
Desde hace meses, el aluvión de sondeos ha caldeado estas elecciones hasta niveles nunca conocidos. A su vista, cuesta entender que cuantas respuestas se han dado desde el Ejecutivo de Pedro Sánchez a los graves problemas que nos han sacudido en estos últimos años no tengan, a priori, un respaldo electoral más claro. No hay peor ciego que el que no quiere ver. Es imposible pensar que entre los 37.466.432 electores que estamos llamados a votar el domingo haya quien no se ha beneficiado de alguna de las medidas sociales, económicas o laborales aprobadas durante la legislatura que ahora concluye. El 23-J es mucho lo que nos jugamos: mantener nuestro bienestar colectivo, ampliar derechos civiles, profundizar en la igualdad de género y la diversidad, consolidar una España más libre, más progresista y con un futuro mejor para todos, frenar el blanqueo político de la ultraderecha,… Por eso, y llegado al culmen de esta ofensiva reaccionaria que nos acosa, no es el momento de quedarse en casa rumiando desilusiones, desengaños o despechos. Nuestros votos son una palanca muy poderosa y no debemos despilfarrarla. Si se quiere, se puede. Así pues, ni un paso atrás, ni una papeleta menos en las urnas.