El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) ha licitado, por un presupuesto de 4,3 millones de euros (IVA incluido) las obras de acondicionamiento de la carretera TO-23, en Toledo, para adaptar su recorrido a los criterios urbanos de movilidad. El anuncio correspondiente será próximamente publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE).

La actuación permitirá mejorar las condiciones de seguridad de los usuarios más vulnerables, como peatones y ciclistas, gracias a la construcción de vías separadas de la carretera y de una pasarela elevada para evitar los pasos peatonales existentes.

De esta forma, la obra incluye la creación de una vía ciclista de 8,8 kilómetros de longitud que partirá de la glorieta de Santa Bárbara y atravesará el polígono de Santa María de Benquerencia, con una anchura entre 2,50 y 4 metros según los tramos y bordillos en ambos lados. El firme estará compuesto por zahorra artificial recebada en superficie con polvo de sílice, tal como ha solicitado el Ayuntamiento de Toledo, organismo al que se cederá la obra una vez ejecutada.

Asimismo, se elevará una pasarela atirantada de uso mixto ciclista y peatonal que permitirá atravesar la TO-23 en el enlace con la calle Valdemolinos.

Finalmente, se llevarán a cabo el drenaje superficial de la vía con caños y badenes, la señalización horizontal de los cruces de calzada y la vertical de la vía ciclista, y la iluminación de un tramo de la TO-23 en el que se sustituirán las luminarias existentes por otras de tipo led.

Este proyecto se incluye dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), que contempla invertir hasta 659 millones de euros (sin IVA) de los fondos NextGenerationEU en la modernización túneles, la protección de usuarios vulnerables y fauna, la promoción de la sostenibilidad y la eficiencia energética y la reducción del ruido en la Red de Carreteras del Estado.

Del mismo modo, la actuación está alineada con la Estrategia Estatal por la Bicicleta, un plan que pretende fomentar el uso de la bicicleta en todos sus ámbitos: como medio de transporte cotidiano, como actividad turística o como herramienta para el deporte y el ocio, siempre con el objetivo de avanzar hacia la movilidad sostenible y activa.

Para lograrlo, uno de los aspectos fundamentales es posibilitar la circulación en bicicleta de forma segura mediante la construcción de infraestructuras como ésta.