Con el horizonte de las elecciones municipales y autonómicas del próximo día 28 en el foco, la vivienda se ha convertido en el asunto estrella de la precampaña, con un goteo de anuncios y promesas para intentar atraer a los jóvenes que enfrenta a todos los partidos.
Se trata de una cuestión que ha estado planeando durante toda la legislatura, por la intención del Gobierno de aprobar la primera ley de vivienda de la democracia, que solo fue posible en la recta final, tras casi un año y medio bloqueada en el Congreso y con el rechazo de socios habituales del bloque de investidura como el PNV y Junts.
Pese a ello, el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, saca pecho por haber logrado aprobar la norma, aunque asumiendo que la vivienda sigue siendo la asignatura pendiente ante los jóvenes. Una justificación que le ha llevado a lanzar diferentes anuncios en este sentido desde el pasado mes de abril, el último relativo al impulso de una línea de avales de hasta el 20 por ciento de las hipotecas para facilitar el acceso a un hogar.
El Partido Popular, mientras, critica al Gobierno, y recuerda que su líder, Alberto Núñez Feijóo, ya presentó también en abril una propuesta en la que prometía avalar el 15 por ciento total de la compra de una casa para que, junto con la hipoteca, los jóvenes consigan el 100 por 100 del dinero que necesitan para la adquisición.
Junto a ello, el PP reprocha al Ejecutivo que en su ley de vivienda no haya ninguna referencia al problema de la okupación, ante el que Feijóo se ha comprometido a garantizar el desalojo de las ocupaciones ilegales en 24 horas aumentando los delitos, endureciendo las penas y destinando más recursos a los tribunales y a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.
Los conservadores consideran que la propuesta es una «copia» de sus políticas, por lo que animan a Sánchez a seguir replicándolas pero haciéndolo «bien», como destacó ayer el portavoz de campaña del PP, Borja Sémper, y así las apoyaremos, lógicamente», resaltó.
«Es un camino correcto, pero llega bastante tarde», sostuvo en esta línea la número dos del PP, Cuca Gamarra, no sin antes asegurar que Sánchez, tiene un «déficit de credibilidad» en materia de vivienda porque en cinco años en Moncloa ha empezado a preocuparse por este tema justo en periodo electoral: «Ha estado desaparecido», apuntó.
La ministra de Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, sostuvo que las ideas del Gobierno en materia de vivienda han tenido una acogida excelente dentro del sector inmobiliario, que aseguró, muestra su complicidad y compromiso hacia este cambio de paradigma.
Así lo defendió tras participar en una reunión con el sector que estuvo encabezada por el jefe del Ejecutivo y a la que acudieron también las titulares de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, y de Defensa, Margarita Robles. Sánchez aseveró que esta cita buscaba explicar al sector inmobiliario todas las medidas, escuchar sus necesidades, profundizar en las cuestiones de la ley de vivienda y las oportunidades que presenta este nuevo modelo.
En cuanto a la nueva línea de avales para facilitar la compra de vivienda, la ministra de Movilidad y Agenda Urbana afirmó que podría beneficiar hasta 50.000 personas según los cálculos iniciales.
Pese a ello, la iniciativa socialista fue fuertemente rechazada por su socio de coalición, Unidas Podemos. De hecho, la formación morada arremetió contra ella y la tachó de «infamia».
En Podemos interpretan esta iniciativa como electoralista. Para el portavoz de la formación morada, Pablo Fernández, se trata de una medida «de Ana Patricia Botín» que han elogiado el PP y la ultraderecha.