El Ayuntamiento de Talavera ha abierto el proceso de participación ciudadana para la elaboración del Plan Especial de Salvaguarda de los procesos artesanales de la cerámica talaverana a través de dos cuestionarios dirigidos a la población en general y al sector artesano en particular. Así lo dio a conocer este lunes en rueda de prensa el concejal de Patrimonio, Sergio de la Llave,  quien recordó que este Plan de Salvaguarda es «una hoja de ruta» que se debe redactar a raíz de la declaración de estos procesos como Patrimonio Inmaterial Cultural de la Humanidad y que estará vigente «a lo largo de los próximos años».

Este lunes ha arrancado el proceso de participación ciudadana, que se extenderá hasta el 4 de noviembre, para iniciarse en diciembre el periodo de exposición pública y finalizar a lo largo de febrero el documento con las nuevas aportaciones que puedan existir para ya «de cara a la primavera tener el documento en marcha».

La elaboración de este Plan de Salvaguarda arrancó el pasado febrero de la mano de un equipo de trabajo formado por especialistas en diferentes materias. Entre ellos figura el antropólogo de la UCLM Juan Antonio Flores Martos, el arqueólogo Rubén Pérez López, la delegada de la Cámara de Comercio en Talavera Milagros Aceituno, el doctor en Historia del Arte Fernando González Moreno, la ceramista e integrante de Tierras de Cerámica Mónica García del Pino, la arqueóloga Ana Escobar, la periodista Arancha Camacho, todos ellos bajo la coordinación de Sergio de la Llave, en su calidad de gestor del Patrimonio cultural.

Como indicó el concejal, el plan está «bastante avanzado» con varios bloques cerrados, si bien resta «una de las partes más importantes» como es la participación pública. De hecho, a la hora de elaborar este tipo de planes, la Unesco da especial relevancia a la participación de la comunidad portadora y otro tipo de agentes sociales, como recordó De la llave, quien explicó en este sentido que, lo que se busca es «intentar tener un alto grado de participación para obtener una serie de datos relacionados con cuál es el estado actual en relación con esos procesos artesanales».

Todo ello persigue la adopción de una serie de medidas de carácter transversal cuya finalidad es «preservar las técnicas y procesos artesanales» y, sobre todo, «ir buscando solución a los retos que quedan por delante». Entre ellos, De la Llave se refirió al relevo generacional, dar continuidad a la vida de los talleres cerámicos y potenciar la pervivencia de esos procesos artesanales.

Para dar cabida a esta participación se han elaborado dos cuestionarios, uno enfocado al público en general y otro exclusivamente para el sector artesano de Talavera. El cuestionario para la población en general, abierto también a personas de fuera de Talavera, consta de 4 bloques y 18 preguntas específicas, y el dirigido a artesanos cuenta con 6 bloques y 19 preguntas. Lo que se pretende es  «poner cara a los diferentes retos o problemas» que tiene en la actualidad la cerámica y «plantear toda una serie de posibles soluciones a esos retos».

En el cuestionario dirigido a los artesanos, se abordan cuestiones desde el punto de vista de la memoria histórica de los propios artesanos y otras que tienen como fin «conocer desde dentro cuáles son las posibles soluciones que se intenta dotar al mantenimiento de estos procesos».

Los cuestionarios se pueden encontrar en el portal web: patrimonioinmaterialceramica.com así como en redes sociales y en formato papel en lugares estratégicos como bibliotecas y universidades, entre otros. Se llevarán a cabo además diferentes reuniones de carácter sectorial con algunas entidades sociales, desde artesanos a colectivos culturales y vecinales, entre otros.

En el caso de los artesanos, se programará un encuentro presencial de la mano de Fracaman para facilitarles este cuestionario y que puedan realizar más aportaciones si así lo consideran. Se contará los cerca de 15 talleres en activo como con artesanos jubilados o en proceso de jubilación.

Como recalcó De la Llave, este plan no se concibe «como algo cerrado», sino que «lo importante es que esté vivo a lo largo del tiempo de su vigencia y que tenga capacidad de añadir nuevas medidas y pueda ser revisado y también evaluado».