Representantes de los colectivos sociales Mujeres de Negro Contra la Guerra, Red SOS Refugiados Europa y el Grupo Local de Amnistía Internacional conmemoraron el primer aniversario de la tragedia en la valla de Melilla. El salto masivo que se produjo durante el 24 de junio de 2022 segó la vida de decenas de personas y dejó casi un centenar de desaparecidos.
Rafaela Alonso, coordinadora de AI en Toledo, defiende la «movilización» social ante la «absoluta indiferencia» que los actores implicados en aquellos hechos han mostrado «por investigar».
Lo ocurrido en el paso fronterizo entre Marruecos y España sigue siendo una incógnita para la opinión pública. «No se sabe con seguridad la cantidad de personas que murieron», indica Alonso, quien apunta que «como mínimo, fueron 37, la mayoría procedentes de Sudán y Sudán del Sur». Además, «hay 77 desaparecidos que no se sabe dónde están» y sobre las que «ni las autoridades marroquíes ni las españolas» han ofrecido explicación alguna.
«Vemos un despliegue de medios descomunal para rescatar el batiscafo, pero el naufragio en Canarias no está resultando tan interesante de buscar», lamenta.Representantes de los colectivos sociales Mujeres de Negro Contra la Guerra, Red SOS Refugiados Europa y el Grupo Local de Amnistía Internacional conmemoraron el primer aniversario de la tragedia en la valla de Melilla. El salto masivo que se produjo durante el 24 de junio de 2022 segó la vida de decenas de personas y dejó casi un centenar de desaparecidos.
Rafaela Alonso, coordinadora de AI en Toledo, defiende la «movilización» social ante la «absoluta indiferencia» que los actores implicados en aquellos hechos han mostrado «por investigar».
Lo ocurrido en el paso fronterizo entre Marruecos y España sigue siendo una incógnita para la opinión pública. «No se sabe con seguridad la cantidad de personas que murieron», indica Alonso, quien apunta que «como mínimo, fueron 37, la mayoría procedentes de Sudán y Sudán del Sur». Además, «hay 77 desaparecidos que no se sabe dónde están» y sobre las que «ni las autoridades marroquíes ni las españolas» han ofrecido explicación alguna.
«Vemos un despliegue de medios descomunal para rescatar el batiscafo, pero el naufragio en Canarias no está resultando tan interesante de buscar», lamenta.