La Mancha toledana es la zona más seca de la región

Jacobo Gamero
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Las zonas céntricas de Castilla-La Mancha apenas han alcanzado los 15 litros por metro cuadrado en estos primeros meses de 2023. Mayo será especialmente seco este año

Cauce del río Jabalón seco. - Foto: Rueda Villaverde

La falta de agua en la región en estos últimos meses está siendo uno de los temas más preocupantes para los ciudadanos, y en especial para los agricultores. Para algunos, este último año ha sido uno de los más secos de Castilla-La Mancha, pero ¿es esto cierto? ¿Cómo ha sido el primer trimestre de 2023 comparándolo con el año pasado?

Repasando 2022, según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), España ha sido en su conjunto muy seco en cuanto a precipitaciones, con un valor de precipitación media sobre España peninsular de 536 mm, valor que representa el 84% del valor normal en el periodo de referencia 1981-2010. Estos datos demuestran que ha sido el sexto año más seco desde el comienzo de la serie en 1961, y el cuarto del siglo XXI.

La precipitación acumulada del año pasado fue inferior al valor normal en prácticamente toda la Península, llegando a ser inferior al 75% en puntos del país incluyendo la región como en Guadalajara, «una de las zonas donde más precipitaciones hay en la comunidad».

Por el contrario, la precipitación acumulada sí que llegó a superar el 100% del valor normal en el sureste de la Aragón, la comunidad Valenciana, Almería, Murcia, el norte de Granada. Castilla-La Mancha también tuvo puntos donde se superó este valor, como en Albacete, áreas de Cuenca y en Toledo.

Marcelino Rojas, delegado de la Agencia Estatal de Meteorología en Castilla-La Mancha, confirma que «los últimos doce meses en la región han sido especialmente secos», pero a esto le suma que el arranque de 2023 «lo está superando».

Realizando un análisis por estaciones, según la Aemet, la primavera castellano-manchega empezó siendo «especialmente húmeda en marzo y abril, y extremadamente seca en mayo. A pesar del mes de mayo, son datos aparentemente normales si los comparamos con otros años», explica Marcelino Rojas. En este trimestre, fue en la estación Casas de Ves de Albacete donde se registró la mayor cantidad de precipitaciones con 101,1 l/m² en marzo, y por el contrario el punto más seco se registró en mayo de 2022 en la estación de Ciudad Real con 0,8 l/m².

El verano de Castilla-La Mancha tuvo un mes de junio muy seco, un julio seco y un agosto normal. Los datos extremos sobre las precipitaciones en este trimestre lo marca la estación de Albacete base aérea en agosto como el punto donde más precipitación hubo (27 l/m²) y los más bajos fueron Ciudad Real y Toledo en julio registrando un total de 0 l/m².

Por su parte el otoño se ha caracterizado por ser un trimestre seco y normal, al igual que en la mayoría de puntos del país. La estación de Portilla de Cuenca fue la que más precipitación recogió con 98,9 l/m² en noviembre, todo lo contrario a la estación de Ciudad Real en septiembre con 5,8 l/m².

El año 2022 cerró «con una anomalía» para Marcelino, pues iba a marcar las cifras de precipitaciones en el último mes y principio de año, pues llovió más de lo normal. Viendo y observando los datos, son más de tres estaciones meteorológicas que recogen superan los 100 l/m² (Ciudad Real, Talavera y Toledo).

A la hora de analizar el primer trimestre de 2023, «ya está influenciado por ese mes lluvioso de diciembre, cuando la realidad muestra que 2023 está siendo seco, exceptuando Guadalajara y el extremo oeste», afirma Marcelino Rojas.

Observando los datos de enero, febrero y marzo de 2023, se comprueba que efectivamente está siendo un año muy seco. En zonas del norte y oeste de Castilla-La Mancha sí que se recogen más de 30 l/m², pero en zonas más céntricas como La Mancha es difícil superar los 15 l/m² en enero, los  7 l/m² en febrero y los 6 l/m² en marzo.

Está claro que hay zonas más húmedas como La Alcarria, la zona de Molina de Aragón o incluso los Montes de Toledo donde sí que han superado estos valores, pero en la parte central de la comunidad durante este año  «se está arrastrando una sequía camuflada por lo que hubo diciembre», expresa Rojas.

Las previsiones para los próximos meses no tienen mucha variación. «La temperatura va a adoptar un modelo repetitivo, de crecimiento y por encima de lo normal. Por su parte, las precipitaciones en mayo es que sea más seco de lo normal, mientras que en junio y julio se normalizará», analiza Marcelino.

En definitiva, y observando el análisis, se puede afirmar que el primer trimestre de 2023 es ya más seco que el del año pasado. Además, La Mancha es la zona más seca de la región con unos valores mínimos de precipitaciones tanto en los meses húmedos como en los secos. Por su parte, la zona norte como Guadalajara es la más húmeda, aunque para el delegado de la Aemet en Castilla-La Mancha, «el pronostico en la región para los próximos meses no es muy optimista».