Una fotografía de unos alumnos con el maestro don Antonio engendró la investigación. Rubén Pérez, licenciado en Historia y académico de la Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas de Toledo, ha protagonizado un estudio titulado 'Campo agrícola de Camarena', centrado en un proyecto pionero de enseñanza de la agricultura en las escuelas españolas de los años 20 y 30 del siglo XX. Hace 100 años. Hasta ahora, había pasado inadvertida esta propuesta implantada entonces en Camarena y en otros cuatro municipios más de la provincias: Esquivias, Guadamur, Méntrida y Ajofrín.
El éxodo rural hacia las ciudades aumentaba a principios del siglo XX. El fenómeno preocupaba en el seno del Gobierno de España. Por ello, el Ministerio de Instrucción Pública y Bellas Artes decretó en octubre de 2021 la creación de campos agrícolas anejos a las escuelas nacionales de niños en las poblaciones rurales.
«Los campos agrícolas tenían como objetivos primordiales transmitir a los niños el amor al campo y un aprendizaje basado en la experiencia y la práctica, que les permitiera conocer los factores de la producción (plantas, el suelo y el clima), la aplicación de los mismos, para una acertada elección y práctica de los diferentes procedimientos de cultivo y recolección, y los factores económicos de rendimiento», explica el historiador.
Camarena: 100 años de un proyecto de vanguardiaEl Gobierno precribió las exigencias para los solicitantes de una concesión de un campo agrícola. Al menos, el terreno debía alcanzar una hectárea y estar anejo o muy cerca de la escuela. También, que fuera principalmente un terreno de secano. Además, requería de maquinaria agrícola moderna y un registro meteorológico diario.
El maestro Antonio Lenguas y Lázaro presentó el formulario de la escuela nacional de niños de Camarena. Pero la falta de crédito quebró las aspiraciones. De las 77 solicitudes presentadas, 45 cumplían con los requisitos; sin embargo, sólo hubo 25 campos agrícolas.
En agosto de 2022, una nueva real orden anunciaba un crédito para la instalación de nuevos campos agrícolas, como señala Rubén Pérez. Camarena presentó de nuevo la solicitud, aprobada el 22 de octubre de 1922. El campo correspondió al maestro Antonio.
«El campo agrícola de Camarena, que posiblemente se instaló en la zona de la 'Huerta Abajo', según creen recordar varios vecinos de la localidad, estuvo en funcionamiento y siempre bajo la dirección del maestro don Antonio Lenguas y Lázaro desde finales de 1922 y hasta muy probablemente el inicio de la Guerra Civil en 1936, habiéndose documentado el abono de la asignación o subvención anual de 1000 pesetas concedida por el Ministerio al campo agrícola de Camarena, para gastos del mismo (cultivo, semillas, abonos, etcétera), hasta diciembre de 1935», revela.
Los niños debían asistir una vez a la semana al campo agrícola e intervenían en los trabajos más sencillos. Los maestros, como don Antonio, asistían a cursos sobre pedagogía o agronomía. O viticultura, como el de Méntrida en 1925.
Junto con Camarena, hubo otros cuatro en la provincia: Esquivias, a la orden de Edmundo Ruiz; Ajofrín, con León Román Barbero; Guadamur, dirigido por Andrés Hornillos, y Méntrida, con Ángel López Mazzantini, a la sazón alcalde.