Las procesiones del Jueves Santo salieron de sus iglesias y pudieron cumplir con los fieles en una Estación de Penitencia que este año no ha estado marcada por la lluvia. Los cofrades pudieron lucir sus imágenes durante el recorrido establecido sin prisas, disfrutando del momento y acompañando a las tallas hasta la medianoche, cuando regresaron bajo techo.

La Procesión de La Pasión del Jueves Santo despertó una gran expectación tanto a las puertas de La Colegial, de donde partía la Real Cofradía del Santísimo Cristo de la Misericordia con sus tres pasos, como en la iglesia de San Francisco, de donde salió la Virgen de los Dolores, de la Cofradía Nuestra Señora de los Dolores.

En las puertas del templo de San Francisco se reunían numerosos fieles a la espera de la salida de la Virgen, talla de corte andaluz con manto bordado, toca, corona de orfebrería, encajes, brocados y terciopelos, realizada en 1946 por  Víctor González Gil. Junto a ella, los hermanos con túnica en color blanco hueso con botonadura, cíngulo, capa y capuz en raso verde.

Ellos eran precisamente los que abrían paso a la Virgen de los Dolores a lo largo de los primeros momentos por una calle San Francisco repleta de gente. Emoción, aplausos y serenidad recogida al paso de la imagen de una de las Vírgenes más bellas de la Semana Santa talaverana.

En La Colegial, prácticamente a la misma hora, salían a la plaza del Pan los tres pasos del Cristo de la Misericordia, grupo escultórico que recoge tres de los hechos clave de la Pasión del Señor: la Oración en elHuerto, La Flagelación y el Calvario, en el que María Santísima, San Juan Evangelista y María Magdalena lloran la muerte del Señor. Los cofrades, con hábitos morados, acompañaron a sus tres pasos, clásicos en la Semana Santa de la ciudad al ser de los más antiguos que procesionan por sus calles.

viernes santo. Ya el Viernes Santo, la Procesión del Santo Entierro pudo salir igualmente sin mirar demasiadas veces al cielo, como en años anteriores. Este año la meteorología ha sido benévola con las Cofradías y les ha permitido sacar sus imágenes en un actoque llevan esperando durante todo un año.

Las cuatro cofradías del Viernes Santo realizaron íntegro su recorrido uniéndose en la carrera oficial en una procesión digna del día grande de la Semana Santa. La Cofradía de la Cruz de los Alfareros y del Santísimo Cristo de la Voluntad inició la procesión a las 18 horas de la tarde saliendo de La Salle con sus imágenes y sus tradicionales hábitos en azul y blanco y detalles cerámicos. Resalta el alto número de pequeños costaleros que acompañaron al paso portando hábito, paso y cruces al inicio del recorrido.

La RealHermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno, la Santa Mujer Verónica y María Santísima de la Esperanza fue la segunda en salir a la calle desde la iglesia de Santiago. Sus tres pasos, de los más bellos y emotivos, animaron al recogimiento y la oración al verlos procesionar desde la plaza de los Descalzos hasta la Colegial y después de vuelta a Santiago.

La Cofradía de Regantes conMaría Santísima de la Paz volvió a recorrer el Casco de Talavera saliendo y volviendo a la Colegial, junto al Cristo de los Espejos, alabado no sólo por su belleza sino por el trabajo de los cargadores al sacarlo del templo de la plaza del Pan.

La Procesión del Santo Entierro no está completa sin la Cofradía del Santo Sepulcro y la Virgen de la Soledad. Ambas imágenes salieron de San Prudencio pasadas las 21 horas, aportando al desfile procesional la serenidad y la sobriedad de una noche repleta de sentimientos.