El asesinato de Lorenzo es archivado temporalmente

F. J. R.
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El sobreseimiento provisional se decretó al cumplirse un año del crimen al no tener la investigación policial un sospechoso claro. La familia ha recurrido y pide nuevas diligencias y declaraciones

El sobreseimiento provisional ha causado gran dolor a la familia, que sigue clamando justicia. - Foto: Yolanda Lancha

El caso del asesinato del joven de 21 años Lorenzo Pompiliu ha sido sobreseido de forma provisional por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 3 de Toledo. Se trata de un archivo temporal de la causa ante la falta de información con las diligencias indagatorias. 

Al cumplirse el pasado mes de octubre un año de los hechos, la ley establece el sobreseimiento provisional, aunque el abogado de la familia ha recurrido el archivo y se espera que se autorice una prórroga de seis meses al caso que el juez podrá ir ampliando hasta el momento que considere que no será posible finalizar la investigación.

Con todo, ese punto de momento no ha llegado. Es cierto que el archivo temporal de la causa obedece al hecho de que, a pesar de que ha habido varios sospechosos del asesinato durante los 16 meses que se cumplen de investigación policial, la autoría de la salvaje muerte de Lorenzo es aún desconocida.

El archivo temporal de la causa es una gran frustración para la familia y el enorme 'pero' que se puede poner a la labor policial, que a pesar de volcarse con el caso tanto desde la Policía Judicial de Toledo como desde la Unidad Central de Delincuencia Especializada y Violenta, ha resultado hasta la fecha infructuosa.

Con la intención de que el caso no quede definitivamente en vía muerta y se produzca un sobreseimiento definitivo, la familia de Lorenzo no ha dejado de interponer recursos y de pedir que se ejecuten nuevas diligencias de investigación al proceso.

La intención de los familiares pasa por realizar nuevas declaraciones que ayuden a aclarar quién se encontraba detrás de la máscara que acabó de un machetazo en el cuello con la vida de Lorenzo en la madrugada del 31 de octubre de 2021.

La noche de su asesinato, Lorenzo caminaba en compañía de su amigo Álvaro --único testigo presencial de los hechos-- por el carril bici del Parque Lineal del Polígono, cuando a la altura de la calle Río Guadiloba, sobre las 2:25 de la madrugada, fueron abordados por un individuo que caminaba en dirección contraria, procedente de la zona de la piscina municipal del barrio.

Ese hombre llevaba una máscara «tipo calavera», según el testigo presencial, que le cubría por completo el rostro y en una de sus manos «un machete de grandes dimensiones».

Esta persona les solicitó dinero y, como inicialmente ambos amigos tuvieron la sensación de que pudiera tratarse de una broma, cosa que percibió el asaltante, llegó a golpear con fuerza el suelo con el machete al tiempo que les decía: «¡Qué es verdad, eh!, mostrando así una actitud agresiva y violenta.

Álvaro le dijo que llevaban poco dinero y Loren (como así le llamaban sus amigos) se ofreció a entregarle dinero por los dos. Sacó de su cartera un billete de diez euros que el asaltante cogió y, seguidamente, Lorenzo le preguntó qué billete le había dado. El asaltante se lo mostró y Lorenzo volvió a coger el billete, instante en el que, sin previo aviso, el agresor le asestó un machetazo, de arriba a abajo, que le provocó una herida mortal de necesidad en la parte izquierda del cuello, para a continuación, lanzar otro a Álvaro que le hirió mínimamente en la zona interna de la oreja izquierda.

El  asesino huyó y el testigo telefoneó al 112, que solo pudo certificar la muerte por desangramiento de Lorenzo.

Esa misma noche, otro grupo de jóvenes afirmaron haberse cruzado con un individuo de muy similar descripción, aunque concretando que la máscara correspondía a la película de terror 'Viernes 13', tipo portero de hockey sobre hielo.

Ese individuo les amenazó con un machete y les persiguió, afirmando los jóvenes que se comportaban como «un sádico», como un «psicópata de película» que había salido «a cazar».

A raíz del asesinato, la policía registró una vivienda de los conocidos como Pisos Negros del Polígono, lugar donde esos jóvenes se encontraron con el presunto asesino. Además se pincharon los teléfonos de otro sospechoso del barrio y de su madre.

Las investigaciones realizadas en Toledo cayeron en vía muerta y el caso terminó pasando a Madrid. Allí, la Unidad Central de Delincuencia Especializada y Violenta realizó una triangulación de móviles en aquella noche en el Parque Lineal y trazó un perfil del asesino, sin terminar de dar sus frutos tampoco esa vía de investigación.

Por último, el pasado mes de noviembre se produjo otra agresión con machete a unos 400 metros del lugar de la muerte de Lorenzo. El autor sí fue perfectamente identificado y detenido horas después. En esta ocasión la víctima pudo sobrevivir debido a la rápida reacción de un testigo que lo llevó en coche hasta el hospital. Ese herido era uno de los testigos del presunto asesino en los Pisos Negros. 

La familia de Lorenzo trató de personarse en esa causa por si tenía alguna vinculación con su caso, pero el juez desestimó todo.

La investigación del asesinato de Lorenzo sigue abierta, la policía sigue trabajando, pero la falta de indicios puede llevar a su cierre definitivo, dejando sin justicia a una familia y a un asesino libre en las calles.