Trabajadoras del hospital Virgen del Valle se han manifestado a las puertas del centro para exigir la readmisión de su compañero Pablo Alcocher. Se trata de un trabajador despedido por la empresa concesionaria, ISS, según denuncian, por oponerse a unos cambios laborales con las que ellas tampoco están de acuerdo. Casi todo el hospital, advierten, han firmado en una recogida de firmas que solicita su readmisión. No sería el único trabajador despedido por la misma concesionaria, porque hay otro caso en el hospital Provincial.
Según explicaba la delegada de personal de CCOOMaría Teresa Carrasco, fue una Inspección de Trabajo la que denunció que la nueva empresa, que entró a gestionar la limpieza del hospital el pasado mes de febrero, estaba aplicando mal las libranzas, porque solo libraban un día a la semana. Ante el requerimiento, la concesionaria se comprometió a buscar una solución, pero también está aprovechando para aplicar otras modificaciones de las condiciones laborales, como la eliminación de festivos o una salida anticipada fines de semana y festivos, algo sobre lo que, recuerda, hay ya sentencias ganadas.
El despido. «Nadie estamos conformes con los acuerdos que la empresa nos ha propuesto», apunta Carrasco. Tampoco lo estuvo Pablo Alcocher, al que, sin previo aviso, según estaba trabajando, le llamó la empresa «para decirle que se vistiera y se fuera para su casa, que estaba despedido». La explicación que le dieron fue que se iba a la calle por no estar de acuerdo con las modificaciones, «pero es que de acuedo no estamos nadie y ha habido compañeros que hemos protestado mucho más», insiste Carrasco.
Pablo, explicó la delegada entre las voces de sus compañeras que pedían la readmisión, «es un excelente trabajador, una persona comprometida con su trabajo, un compañero excepcional; durante la Covid hemos pasado mucho y este señor ha estado dándolo todo al cien por cien. No hay un motivo de despido». Tanto es así, que ya hay otra persona sustituyéndolo. Así que «no vemos el motivo, si esto es una amenaza para achicarnos a todo el personal, cuando este ha sido un centro en el que nunca ha habido problemas».
Al tiempo que sus compañeras hacen esta denuncia pública, han organizado una recogida de firmas que cuenta con el apoyo de prácticamente todo el hospital y él ha reclmado legalmente a través de la asesoría jurídica de CCOO. Carrasco apuntó además que se ha dado un segundo caso de despido a una trabajadora de la limpieza por parte de ISS en el hospital Universitario «pensamos que también sin motivo ninguno».