Foráneos que ensalzan el mundo rural

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'Nuestro propio pueblo' es un original formato de Channel 4 donde varias familias inglesas se convierten en las propietarias de pequeños pueblos de España, Francia, Italia y Portugal

Los felices compradores narran su particular experiencia de aportar una segunda oportunidad a estos lugares desconocidos para convertirlos en su hogar, repoblándolos y desarrollando en ellos su periplo vital y sus negocios. - Foto: Vía COSMO

En Europa existen cientos de poblaciones abandonadas esperando la llegada de nuevos habitantes. Cansados de la vida en la ciudad y decididos a emprender una vida diferente en el medio rural, un grupo de inversores británicos se lanza a cumplir su sueño comprando un poblado. El lunes, a las 21,00 horas, COSMO estrena Nuestro propio pueblo, un original formato de Channel 4 donde varias familias inglesas se convierten en las propietarias de pequeños pueblos y aldeas de España, Francia, Italia y Portugal.

Cada uno de estos lares del Sur de Europa tiene su idiosincrasia, pero todos comparten un pasado común. Con el tiempo, estas comunidades se han vaciado tras el fallecimiento de sus vecinos y el traslado de las generaciones más jóvenes a las ciudades. Pero los protagonistas de Nuestro propio pueblo darán una segunda oportunidad a estos lugares para convertirlos en su hogar, rehabilitándolos, repoblándolos y desarrollando aquí sus negocios. 

Una propiedad privada, un centro de rehabilitación de animales o un alojamiento turístico son algunas de las infinitas posibilidades que ofrecen estos municipios a sus nuevos propietarios, que en este programa convierten lo que muchos ven como ruinas en destinos de ensueño. La tarea no es sencilla y la mayoría de los obstáculos están relacionados con el mal estado de los inmuebles: desde problemas con los tejados y las fachadas a la demolición de casas enteras por daños en su estructura. 

Los felices compradores narran su particular experiencia de aportar una segunda oportunidad a estos lugares desconocidos para convertirlos en su hogar, repoblándolos y desarrollando en ellos su periplo vital y sus negocios.Los felices compradores narran su particular experiencia de aportar una segunda oportunidad a estos lugares desconocidos para convertirlos en su hogar, repoblándolos y desarrollando en ellos su periplo vital y sus negocios. - Foto: Vía COSMOCada episodio de Nuestro propio pueblo cuenta la historia de dos compradores y los pueblos que han adquirido. La mayoría huyen de los altos precios de Reino Unido en busca de paisajes deslumbrantes y un estilo de vida más tranquilo. Muchos pasan meses o incluso años reparando estas aldeas, esperando atraer a habitantes en el futuro o simplemente disfrutan de este proceso como parte de su nuevo plan de vida.

Nuestro propio pueblo lleva los programas de reformas y bricolaje a otro nivel, mostrando las dificultades, pero también las ventajas, de adquirir una villa. Con tesón, esfuerzo e ilusión, estas encantadoras familias transforman estos lugares abandonados para que puedan contar una nueva historia. Y demuestran a los espectadores que este proyecto no tiene nada de utópico: la mayoría de los compradores adquieren estos pueblos y aldeas por la misma cantidad que costaría una casa en una gran ciudad o incluso la entrada de un piso. Por poner un ejemplo, Paul Mappley y Yip Ward compraron La Busliere, en Normandía, por 25.000 euros.

El espacio que se estrena el lunes ofrece un recorrido por Europa para redescubrir lugares rurales olvidados de la mano de personas esperanzadas con volver a darles vida. En los primeros programas, se verá a los diferentes propietarios salvar una villa italiana situada en lo alto de una colina, pintar en el mapa un pueblo francés medieval amurallado y finalizar la compra de una hermosa aldea de Galicia.

El sur, Asturias y Galicia

Las regiones elegidas por estas valientes parejas en España son Andalucía, Asturias y Galicia. 

Marcial Doporto es el primer comprador que visita España en Nuestro propio pueblo. Este londinense fija sus ojos en O'Penso, una aldea de la provincia de Lugo cuyos últimos habitantes, Benita y Senín, muestran su antiguo hogar. El intermediario es Mark Adkinson, otro británico que después de 40 años viviendo en Galicia montó junto a su mujer Rosi una inmobiliaria especializada en pazos y aldeas abandonadas: Galician Country Homes. Doporto compra O'Penso por 225.000 euros, cifra que, en sus propias palabras, «no alcanza ni para comprar un piso de una habitación en la capital inglesa».

Steve y Julie Ward son los flamantes propietarios de Cuevas de la paz, unas antiguas cuevas de pastores reconvertidas en alojamientos rurales. Situado en la provincia de Granada, este interesante complejo cuenta con infraestructuras para disfrutar de una idílica escapada rural, salvo una piscina, el principal proyecto de la pareja en el programa. 

El mayor reto constructivo lo afronta Neil Christie en Arruñada, Asturias. En 2005 este británico adquirió esta pedanía del concejo de Taramundi por 45.000 euros y desde entonces lo está rehabilitando con sus propias manos. Su propiedad incluye ocho casas de piedra, un pequeño bosque, un arroyo y más de tres hectáreas de terreno. Desvela que al principio los lugareños lo miraban recelosos, convencidos de que pronto cejaría en su empeño. Casi dos décadas después, Christie deja claro que no tiene intención de irse y que la transformación del lugar es impresionante.