El toledano Darío Sánchez debería representar a España el próximo mes de diciembre en el Mundial de Rotax que tendrá lugar en Baréin. Sin embargo, una negligencia de la Federación Madrileña de Automovilismovilismo al aplicar el reglamento le privó de la victoria en el Campeonato de Madrid de MiniRotax y de acudir a la cita mundialista. Sus padres han reclamado por todas las vías posibles, y ya solo queda la legal para corregir un problema al que entienden que no se debería haber llegado.
Así lo reconoce su madre, Teresa Gálvez, quien insiste en que agotarán todos los pasos posibles para conseguir justicia. Y es que, después de la última carrera, celebrada en el circuito de Recas, se dio el triunfo al madrileño Daniel del Moral, con 196 puntos, por los 195 del toledano. Sin embargo, los organizadores no tuvieron en cuenta el punto adicional que siempre se otorga por conseguir la 'pole', que había sido para Darío.
Aunque parece insignificante, el empate a 196 puntos le habría dado la victoria al toledano, al haber conseguido más triunfos que su contrincante en el global del campeonato. Desde su club, el TDKart Racing, se realizaron las reclamaciones oportunas, pero la Federación Madrileña de Motocilismo alegó que ese punto no se había contabilizado en pruebas anteriores porque nadie lo había reclamado.
Como asegura Teresa Gálvez, «no entendemos esa razón porque lo que pasara en otras carreras nos da igual, el caso es que nosotros lo pedimos después de esta, y le correspondía a Darío».
Evidentemente, la familia de Darío Sánchez no quiere que se prive a Daniel del Moral de su condición de representante español en el Campeonato del Mundo, y consideran que una escapatoria a la situación puede ser acudir con dos invitaciones, algo que, por el momento, parece imposible porque España solo tiene un pase por categoría. «Entendemos que el otro niño tiene 10 años, y no queremos que se lo quiten, pero mi hijo también tiene 10 años, y lo hemos reclamado en tiempo y forma», añade la madre del piloto.
La intención es poner el asunto en manos de los jueces, aunque el Mundial se celebra entre el 2 y 12 de diciembre. Teresa Gálvez es consciente de que no van a llegar a tiempo de que se resuelva a su favor, algo de lo que están convencidos, así que, si al final sucede, se pregunta «¿cómo se cuantifica luego eso? Porque si te dan el pase para otro año igual no estás preparado», reconoce la progenitora.