«Juntos en la producción de un gran vino y en su venta ¡todos a una!». Esta fue la dedicatoria con la que Paco Núñez firmó esta tarde una de las barricas de la bodega Yuntero, de la cooperativa Jesús del Perdón de Manzanares. El mensaje elegido era de ánimo, pero el candidato del PP mostró su preocupación por las dificultades que afronta el campo por la falta de lluvias.

«Toda la cadena de producción se está viendo tremendamente afectada por la terrible crisis que está provocando la sequía», avisa Núñez, que teme que cooperativas e industrias agroalimentarias empiecen a dar pérdidas por la escasez de materia prima que va a haber por la situación meteorológica. No es la primera vez en campaña que reclama más ayudas al sector agrario para paliar estas pérdidas, pero ayer se comprometió además a tomar cartas en el asunto si es el próximo presidente de Castilla-La Mancha. 

«Voy a poner en marcha un Plan de Rescate para el sector primario como consecuencia de la sequía», anunció, «vamos a rescatar a nuestros agricultores, ganaderos, a cooperativas y bodegas». 

Núñez promete un Plan de Rescate por la sequía inmediatoConcretó que el objetivo es que en ninguno de estos casos se cierre una explotación, se abandone un terreno o se clausure una industria agroalimentaria o cooperativa porque haya entrado en quiebra por culpa de la sequía. Y es que Núñez avisa de que lo que cierra, luego es difícil que vuelva a abrir aunque ya el año siguiente fuese bueno de lluvias. 

La idea de este Plan de Rescate es ingresar «de manera directa, urgente y con liquidez neta las cantidades económicas necesarias para evitar la quiebra del sector primario». Señaló que en la cuenta corriente del agricultor, del ganadero o de la cooperativa tiene que llegar el dinero necesario para que no cierren. Núñez sabe que ya se han anunciado ayudas, pero avisa de que las cuantías son pequeñas, que no son suficientes para paliar las pérdidas que va a haber y que no van a llegar a todos.

También advierte de la lentitud con la que se tramitan algunas de estas propuestas de ayudas por estar condicionadas por normativa europea. Se comprometió a que su Plan de Rescate «va a ser realidad en unos días», pues señala que los «agricultores y ganaderos no pueden seguir esperando a que se tramite la ayuda en Europa». Declaró que «tienen que dormir tranquilos y saber que en un momento excepcional, ante una sequía excepcional, el Gobierno va a tomar medidas excepcionales».

Contó que ya de nada sirve lamentar lo que no se ha hecho, pues cree que la situación no sería tan mala si se hubiese invertido en infraestructuras hídricas o si hubiese un plan hidrológico nacional o un programa de contigencia contra las sequías. «Refugiarse en el pasado no va a ayudar al agricultor», comentó.