El agua embalsada en Castilla-La Mancha es, a día de hoy, un 4% menos que la de hace un año. Una cifra que el consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, considera similar a la de 2022, por lo que cree que este verano no habrá restricciones de agua en la región, aunque sí podrían darse problemas puntuales en algunos municipios.

A preguntas de los periodistas tras presidir la Mesa de la Sequía de Castilla-La Mancha, Martínez Arroyo, puso de manifiesto que «vivimos un periodo de sequía muy preocupante, que ya no es únicamente de tres o cuatro años como ocurría hasta hace muy poco, ahora es prácticamente permanente». 

Pero en todo caso, destacó que la situación es similar a la del año pasado, por lo que lanzó un mensaje de tranquilidad a la ciudadanía porque auguró que «de manera generalizada no va a haber restricciones este verano», aunque sí puntuales. 

En este punto, celebró que «estamos mejor preparados de lo que lo estábamos el año pasado», ya que en algunos lugares «algunas de las decisiones que se han tomado por parte del Gobierno regional en este tiempo van a hacer que haya menos problemas que otros años».

Declaración de emergencia por sequía en los ríos. Las cuencas hidrográficas que están en peor situación, «de extrema emergencia» son la del Guadalquivir, del Guadiana y del Segura, respecto a lo que espera de «manera inmediata» que el Gobierno de España declare la emergencia por sequía.

Respecto a las cuencas del Tajo y del Júcar, confía en que se materialice la misma declaración, y por ello, avanzó, hoy escribirá a la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, para que se produzca esta declaración para las cinco cuencas principales de la región.