La DANA se ceba con Toledo anegando toda la ciudad

J.S.
-

El aguacero provocó el desbordamiento del arroyo Valdecubas en Azucaica. Conforme avanzó la tarde, la situación se complicó en el resto de barrios. El arroyo de la Rosa vuelve a inundar el centro de salud y el campo de fútbol de Santa Bárbara

El túnel subterráneo de la TO-23 a la altura del centro comercial 'Luz del Tajo' fue cortado al tráfico a primera hora de la tarde de ayer debido a las bolsas de agua que se formaron en su interior debido al intenso aguacero que cayó durante toda la jornada de ayer sobre la capital regional. No obstante, el tráfico fue desviado por rutas alternativas por lo que el acceso al hospital universitario y al centro comercial estuvo garantizado.

En la jornada de ayer cayeron más de 90 litros por metro cuadrado en la ciudad de Toledo lo que provocó el desbordamiento del arroyo Valdecubas en Azucaica por lo que el agua discurría por algunas calles del barrio aunque no la fuerza con la que lo hizo en la DANA de hace ahora dos años, donde tres arroyos no canalizados -Degollada, de la Rosa y Valdecubas-  se comportaron como tres jinetes del Apocalipsis y provocaron importantes inundaciones y riadas.

La entrada a la capital regional por la carretera de Navalpino también se vio afectada por la intensa lluvia, lo que obligó a cerrar el puente de la Cava en sentido Toledo. No fue la única. La circulación de vehículos en la salida de Toledo por la N-400 fue cortada al trafico pasadas las tres de la tarde. El tramo afectado por la prohibición de circular se circunscribió del kilómetro 8 al 12 de la citada vía. También fue suspendido el tráfico por inundación en la TO-22 a la altura de Mocejón entre el kilómetro 0,5 y 1 en ambos sentidos. Asimismo, a la restricción de circulación en las vías de la ciudad hubo que sumar la carretera del Valle desde el puente de Alcántara hasta la ermita y las Carreras de San Sebatián a la altura de la iglesia de San Sebatián.

Un coche acabó atrapado en la avenida de Ventalomar.Un coche acabó atrapado en la avenida de Ventalomar. - Foto: Bomberos de ToledoLa Dirección General de Tráfico avisa en su página web y en sus redes sociales del corte de las citadas vías. También se produjeron algunas incidencias en la carretera de La Peraleda y en la zona próxima. Allí se vieron afectadas instalaciones públicas y privadas como el Hospital de Parapléjicos o la residencia de ancianos Vitalia Home.

Con todo el barrio del Polígono fue la zona mas afectada de la ciudad a partir del mediodía. En la calle Río Ventalomar los bomberos tuvieron que rescatar a una persona del interior de su vehículo.

 También hubo embolsamientos en Vía Tarpeya y Río Guadarrama donde el agua llegó a afectar a varias viviendas. Los bomberos de la ciudad, que reforzaron los turnos durante la jornada, estuvieron trabajado a destajo desde las 10 de la mañana debido a las múltiples avisos. La situación se complicó a lo largo de la tarde. Por esta razón el alcalde de Toledo, Carlos Velázquez, recomendó a los toledanos que no salgan de sus viviendas si no es estrictamente necesario.

El arroyo Valdecubas volvió a inundar el barrio de Azucaica.El arroyo Valdecubas volvió a inundar el barrio de Azucaica. - Foto: David Pérez«Situación Complicada». «La situación en Toledo es complicada. Por eso queremos pedir la máxima precaución a todos los vecinos», subrayaba el regidor toledano, que mantuvo una conversación telefónica con el presidente de la Junta, Emiliano García Page, yvisitó los barios más afectados y se desplazó junto con Inés Cañizares al parque bomberos para recibir información puntual de primera mano. Además, el alcalde ha convocado mañana a las ocho de la mañana el Comité de Crisis y a las diez reunirá a la Junta de Portavoces.

El alcalde, Carlos Velázquez, y la vicealcaldesa y concejala de Seguridad Ciudadana, acudieron al parque de bomberos y siguieron la evolución de la alerta por las fuertes lluvias en la ciudad.
El alcalde, Carlos Velázquez, y la vicealcaldesa y concejala de Seguridad Ciudadana, acudieron al parque de bomberos y siguieron la evolución de la alerta por las fuertes lluvias en la ciudad.
Conforme avanzó la tarde, la situación se fue complicando en el resto de barrios. Calles con Bajada del Barco o Real en el Casco histórico se convirtieron en auténticos afluentes del Tajo. De la tromba de agua no se libró ni las depedencias de la Policía Local ni tampoco el barrio de Buenavista ni Santa Bárbara donde el arroyo de la Rosa volvió a anegar el paseo de don Vicente y, por consiguiente, el centro de salud y el campo de fútbol. En definitiva, la ciudad no dejó de mirar al cielo en todo el día temorosa de un diluvio que recordó en algunos momentos al ocurrido hacer ahora dos años y cuyas cicatrices no se han cerrado del todo.