«Es el tributo más grande que se le puede dar a una imagen»

Mario Gómez
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El próximo sábado 6 de mayo será coronada canónicamente la imagen de la Virgen del Carmen de Mocejón. «Este proceso constata la devoción del pueblo a la Virgen», destaca Pedro Mancheño, párroco de Mocejón

La Virgen del Carmen de Mocejón será coronada el próximo sábado. - Foto: Ricardo Gómez

Rebasaba España con poco el primer tercio del siglo XIX sin saber lo que venía justo un siglo después con la Guerra Civil, y antes de encontrarse inmersa en el conflicto, el cólera ya azotaba el país.

Es por ello, que en 1834 los vecinos de Mocejón deciden el 16 de julio sacar en procesión a la Virgen del Carmen, para encomendar el fin de una epidemia que estaba mermando la población. Un traslado que discurrió por las calles de la localidad desde el templo antiguo hasta la iglesia nueva, algo tras lo que se produjeron «menos muertes, por lo que se cataloga como milagro».

Ahí nace un voto de fidelidad de Mocejón con esta advocación mariana. Algo que les ha llevado de forma ininterrumpida ha renovarlo cada 16 de julio desde aquella fecha, nutriéndose de una devoción «grandísima», que les llevó a reponer la talla tras desaparecer la anterior durante la Guerra Civil.

La preparación de la Parroquia ha sido intensa durante todo el proceso.La preparación de la Parroquia ha sido intensa durante todo el proceso. - Foto: Ricardo GómezAsí lo explica Pedro Mancheño, párroco de Mocejón, quien se encuentra al frente de los actos que tendrán su culminación este sábado 6 de mayo con una Eucaristía en la que la Virgen del Carmen de Mocejón será coronada.

«Es el tributo más grande que se le puede dar a una imagen», explica emocionado Mancheño. «La Parroquia se ha venido preparando durante los últimos meses y el próximo sábado viviremos un momento muy especial», explica.

El párroco mocejonero desgrana que «la historia es la que nos aboca a coronar a la Virgen», un gesto para el que han debido realizar un proceso que dio comienzo tras la solicitud, para este caso han sido cuatro voces las solicitantes, por las que el Arzobispado de Toledo dio comienzo al estudio de la causa.

La Parroquia de Mocejón, el Consejo Pastoral Parroquial, la Hermandad de la Bienaventurada Virgen del Monte Carmelo de Mocejón y, por voz de la alcaldesa, el Ayuntamiento de Mocejón. Así es como el 16 de julio de 2021, según relata Mancheño, Francisco Cerro, arzobispo de Toledo, comunicó que «se reconocían los méritos suficientes para la coronación canónica de la Virgen del Carmen de Mocejón»; algo que quedó refrendado el 25 de marzo de este mismo año, cuando se promulgó el decreto de coronación.

Una «devoción histórica y muy arraigada en el pueblo», ha sido el principal motor de una coronación que según explica el párroco, «está siendo maravillosa, ya que se está viviendo intensamente con la preparación por parte de toda la Parroquia».

Mancheño explica que «la preparación se está desarrollando a todos los niveles, «niños, enfermos, ancianos....», y que cada 16 de mes, como eco del 16 de julio, se reza un rosario extraordinario. Además de ello se ha realizado un concurso de carteles infantiles, una preparación previa durante estos tres últimos años, así como un Congreso Mariológico Diocesano, «que concluyó con una representación teatral sobre el milagro», cuenta Mancheño.

De esta forma, será el sábado cuando llegue la Virgen de la Muela «que será la madrina de la coronación», tras lo que se celebrará una misa estacional, que comenzará con el traslado de la imagen a las 18:00 horas desde la iglesia parroquial a la Plaza de la Constitución. Allí Francisco Cerro, arzobispo de Toledo, presidirá una Eucaristía en la que estarán también presentes, César García Magán, obispo auxiliar, y Braulio Rodríguez, obispo emérito, siendo «después del Evangelio donde se de lectura al decreto y se proceda a colocar las dos coronas, la de la Virgen y la del Niño», tras lo que continuará la celebración y luego la imagen regresará, ya coronada, a la iglesia.

Ahí se conocerá lo que hasta ahora es el secreto mejor guardado, la corona de la Virgen. «Ha sido impresionante ya que todo el oro y la plata utilizados ha salido del pueblo, lo que no hace sino constatar la devoción a la Virgen», que además de la festividad de julio, cuenta con otra en octubre, ya que «por demanda de los agricultores, en julio era dificil que pudieran participar debido a sus labores», por ello, esto es «devolver un poquito de lo que supuso el milagro de 1934», concluye Mancheño.