Alejandro Bermúdez

Con los pies en el suelo

Alejandro Bermúdez


La torpe excusa del transfuguismo

03/11/2023

La situación en que los socialistas están colocando a España, resulta muy difícil de calificar. Gracias a que estamos ubicados en la Europa civilizada y además integrados en la Comunidad Económica, formada por la mayoría de los países europeos. De lo contrario estaríamos viviendo situaciones similares, sin exageración alguna, a la que viven en Cuba, Venezuela o Nicaragua. Las instituciones se manejan con la misma falta de escrúpulos que en esos países, aunque, por las razones dichas, no se ejerce, todavía, violencia física sobre los opositores. Lo de 'todavía' lo digo quizá con demasiada generosidad, porque es obvio que los socios de este gobierno, sí la han ejercido y de todos los tipos. Desde el tiro en la nuca de la banda que integraba a dirigentes de partidos que ahora apoyan a los socialistas, hasta la sublevación contra el orden legal de otros socios.
La mejor prueba de la calaña de los socios de nuestro gobierno, es que la primera medida que tiene que tomar sin estar aún elegido, es tramitar una ley de amnistía para que los delincuentes y prófugos de la Justicia puedan entrar en la circulación política. Y eso, pese a la fogata que ya han tenido que hacer los socialistas con el código penal, suprimiendo delitos que describen conductas realmente aberrantes, que se penan en cualquier estado. Esto sin tener en cuenta los indultos ya tramitados y los que están en trámite para librar de la cárcel a muchos correligionarios de distintos territorios españoles.
Obviamente el primer responsable de esta inmundicia, es quién ostenta el cargo de mayor rango, pero este probador de colchones no podría revolcarse en el fango sin el apoyo de otros muchos. Otros muchos que no tienen más excusa que su egoísmo y bajeza moral, porque, cuando a alguien lo eligen diputado de su país es para que lo defienda, no para que ayude a su Nerón quemar Roma.
La vergonzosa excusa del transfuguismo no es otra cosa que la más vil justificación de una conducta desleal y cobarde. Desleal al pueblo que lo eligió y que lo ceba con el sudor de su frente, y cobarde, porque mientras en privado admite las atrocidades de la camándula que tienen por jefe, en público se rompen las manos aplaudiendo sus 'hazañas'.
Obviamente, cualquiera con dos, no cuatro, dedos de frente lo entiende; no es lo mismo cambiar de bando, de partido, para conseguir un lucro ilegítimo, que mantener el estandarte de la decencia ante quien lo mancilla sin pudor alguno. Ya sé que es necesario llevar los garbanzos a casa, en el caso del que hablo más bien es caviar iraní, pero se entiende que quienes se ofrecen a su pueblo para representarlo en la institución que representa, nada menos que la soberanía nacional, tiene cualidades para no doblar la cerviz ¿o no? porque quizá, ahí está el problema.
Porque la primera medida que toma cualquier déspota, es rodearse de seres flácidos de moral y amantes de la vida fácil. Sabe que el rebaño sigue al pastor porque lo alimenta, no por sus elevados ideales. Esa medida de rodearse de gentes serviles, sin escrúpulos y con una ambición muy por encima de su valía, raramente falla. ¿En qué se diferencia la coalición que apoya al gobierno en el congreso, de Sierra Morena presidido por 'Seisdedos'?