Los vecinos del barrio de Santa María de Benquerencia quieren participar en las decisiones que afecten a las obras de su entorno. Para ello, por proposición de la Asociación de Vecinos 'El Tajo', el Consejo de Participación Ciudadana del Polígono ha acordado constituir un grupo de trabajo de obras que se reunirá, en principio, un miércoles por mes. Los asistentes al consejo también acordaron que si fuera necesario la periodización podría cambiar, en el sentido de organizar más convocatorias mensuales, si los asuntos tratados en cada momento así lo requieren.
Los primeros movimientos a abordar en ese grupo de trabajo aún por constituir, según lo hablado ayer en el Consejo de Participación Ciudadana, será el Plan de Asfaltado para el barrio. Los vecinos solicitaron al equipo de Gobierno si todavía existe la intención de llevar a cabo el prometido en la legislatura anterior y de ser así, cuáles serían sus prioridades.
El presidente de este consejo de distrito, Ignacio Jiménez, informó de que sí que cuentan con una partida presupuestaria dedicada a este proyecto, pero no encuentran su contenido. En cualquier caso, el también edil de Movilidad ha explicado que trabajan en varios entornos que ellos consideran prioritarios, como son los casos de Vía Tarpeya o la calle Río Valdeyernos. El resto de vías a abordar se tratarán con los técnicos y con los propios vecinos en los grupos de trabajo a constituir.
En un principio, Ignacio Jiménez se mostró en contra de crear dichos grupos, porque dijo que bajo su experiencia «no sirven para nada», pero finalmente los asistentes al consejo le hicieron cambiar de opinión.
ESPACIOS CULTURALES. En otro orden de cosas, 'El Tajo' alertó al equipo de Gobierno de los escasos espacios que cuentan en el barrio para celebrar actividades culturales, especialmente, porque varios se encuentran en obras. Jiménez les trasladó que la Sala de Usos Múltiples del Centro Social podría estar disponible en dos semanas, mientras que la Sala Thalía «requiere de una actuación de mayor coste». El presidente del consejo añadió que le gustaría que este espacio pudiera volver a ser parte de la red municipal de teatros, pero reconoce que para ello necesita una inversión importante «en los camerinos, iluminación e, incluso, en sus butacas». Pese a dicho matiz, Jiménez se comprometió a establecer la actuación en la Sala Thalía como una prioridad.
Ignacio Jiménez descartó la petición vecinal de ampliar el Centro Social con una construcción en la parcela colindante. El edilo lo hizo por ser propiedad de la Junta de Comunidades y, por lo tanto, conllevar un proceso más complejo.