Las RSF se muestran dispuestas a un alto el fuego en Sudán

Europa Press
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El líder del grupo dice que el jefe del Ejército "ha perdido su legitimidad" y asegura que Estado Islámico opera en el país

Una calle en la ciudad de Al Fasher en el marco de los combates entre el Ejército de Sudán y las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF) - Foto: Stringer/Imageslive Via Zuma Pre / Dpa | vía EP

El líder de las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF), Mohamed Hamdan Dagalo, ha expresado su disposición a un alto el fuego a nivel nacional y al inicio de "un diálogo significativo" que ponga fin a la guerra desatada el 15 de abril, que ha dejado miles de muertos y millones de desplazados y refugiados.

En un discurso transmitido a través de su cuenta en la red social X, anteriormente conocida como Twitter, con motivo de la Asamblea General de Naciones Unidas, Dagalo ha dicho que el grupo, ahora declarado rebelde por Jartum, está "totalmente preparado para declarar un alto el fuego en Sudán".

"Esto permitirá la llegada de ayuda humanitaria y permitirá huir con seguridad a los civiles", ha dicho, antes de apostar por "un diálogo significativo y exhaustivo que lleve a una solución política y al establecimiento de un gobierno civil que guíe al país hacia la transformación democrática y una paz duradera".

Dagalo, conocido popularmente como 'Hemedti', ha recalcado que el país "está soportando la guerra más larga en su historia moderna" y ha acusado a la cúpula de las Fuerzas Armadas y a "sus apoyos en el antiguo régimen" de Omar Hasán al Bashir, derrocado en abril de 2019, de estar detrás de los combates.

"Las RSF hemos llevado a cabo esfuerzos delicados y sinceros en colaboración con fuerzas civiles, el mecanismo tripartito con la ONU, la Unión Africana (UA) y la Autoridad Intergubernamental sobre el Desarrollo (IGAD), así que como Cuarteto --Estados Unidos, Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos (EAU) y Reino Unido--, constantemente y de buena de desde el golpe de Estado de octubre de 2021", ha manifestado.

Así, ha hecho referencia a la asonada protagonizada en esa fecha por el jefe del Ejército y presidente del Consejo Soberano de Transición, Abdelfatá al Burhan, quien derrocó al entonces primer ministro de unidad, Abdalá Hamdok, interrumpiendo la transición abierta en 2019 y ahondando la crisis política en el país africano.

'Hemedti', quien hasta el inicio del conflicto era vicepresidente del Consejo Soberano de Transición y aliado de Al Burhan, ha explicado que la asonada llevó a las RSF a "reevaluar su posición" para "perseguir una vuelta al camino de la transformación democrática, camino esencial para lograr los objetivos designados en la Carta de la ONU".

"Las Fuerzas Armadas y sus aliados del antiguo régimen obstruyeron los esfuerzos para garantizar el éxito del proceso político, que estaba a punto de lograrse", ha lamentado, antes de incidir en que la "hostilidad al cambio y la transición democrática" en el seno de la cúpula del Ejército llevó a Al Burhan a desencadenar la guerra.

En este sentido, ha abundado en que el jefe del Ejército "ha perdido su legitimidad tras el golpe de 2021 y el colapso constitucional de abril" y ha criticado que "haya huido de Jartum para defender la guerra y hablar falsamente en nombre de Sudán", en referencia a su traslado a Puerto Sudán y sus últimas giras internacionales para abordar el conflicto, incluida su comparecencia ante la Asamblea General de la ONU.

"No tuvimos otra opción que defendernos y ejercer nuestros derechos naturales y legítimos a la defensa", ha recalcado Dagalo, que ha lamentado la "devastación" de la capital a causa de la guerra y "el desplazamiento de miles de inocentes en (las regiones de) Jartum y Kordofán".

De esta forma, ha advertido de que el conflicto "supone una amenaza a la paz y seguridad regional" y ha denunciado la implicación en las hostilidades de "elementos del grupo terrorista Estado Islámico encabezados por Muhamad Alí al Jazuli".

"Es supone una preocupación sobre la posibilidad de que Sudán se convierta en un nuevo escenario para operaciones terroristas, que pondrían en riesgo la paz internacional y la seguridad en el continente", ha argumentado 'Hemedti', quien ha cargado contra la cúpula de las Fuerzas Armadas por su supuesta responsabilidad en este extremo.

"La amenaza de los grupos terroristas en Sudán aumenta por los llamamientos de la cúpulas de las Fuerzas Armadas como parte de su alianza con algunos islamistas, para movilizar a civiles para que se unan a sus filas", ha destacado, antes de agregar que "estos llamamientos han dado cobertura para la participación de extremistas en el conflicto bajo la bandera de la Brigada Al Bara Min Balik", presuntamente afiliada con el Frente al Nusra, antigua rama de Al Qaeda en Siria.

Abordar las causas subyacentes

Por otra parte, ha incidido en que las RSF "son conscientes" de que "poner fin a la devastación de la guerra y abordar las violaciones de los Derechos Humanos requiere un cese total del conflicto abordando sus causas subyacentes". "Reafirmamos nuestro firme compromiso al proceso de paz, destinado a poner fin a esta guerra impuesta", ha dicho.

"La guerra es sintomática de la crisis de larga data en Sudán, por lo que es imperativo un alto el fuego de largo plazo y soluciones políticas exhaustivas que aborden las causas subyacentes", ha defendido 'Dagalo', que ha argüido que esta guerra "debe ser la que ponga fin a todos los conflictos en Sudán".

Así, ha apostado por "rectificar los problemas históricos" y abrir una "transición democrática" que derive en "la restauración de derechos" y la puesta en marcha de una "justicia de transición" para abordar los abusos y violaciones cometidos en el marco de las hostilidades.

En esta línea, ha reiterado que el objetivo debe ser poner en marcha "un gobierno democrático civil" que guíe el camino para unas "elecciones justas y libres". "Es vital la formación de un gobierno que refleje con precisión la realidad en todas las regiones de Sudán", ha sostenido.

Por ello, Dagalo ha incidido en que el país debe contar con un "sistema federal asimétrico" que tenga en cuenta la "amplia diversidad" de la población sudanesa, incluido "un refuerzo de las autoridades locales" en el marco de un proceso de descentralización del poder.

Hemedti ha cerrado su discurso con un llamamiento a la comunidad internacional, reunida en la Asamblea General de la ONU, a "no olvidar al pueblo de Sudán y la violencia que sufre, desatada por los que rechazan la paz y creen que los problemas pueden resolverse por la fuerza".