Despedida con remontada en el San Francisco (3-1)

David Lara (ADG)
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El CD Torrijos volteó el gol del Quintanar tras el descanso y se despidió de su afición con un triunfo

Despedida con remontada en el San Francisco (3-1)

El CD Torrijos despidió la temporada 2022-23 en el San Francisco con una victoria por 3-1 ante el Quintanar del Rey. La escuadra rojiblanca le dio una buena tarde de fútbol a sus seguidores y logró el triunfo tras remontar un inquietante. La reacción de los discípulos de Esteban Becker fue briosa y le llevó a la cifra de 40 puntos, una cosecha con la que salva una campaña de forma notable.  

El Torrijos salió al terreno de juego con una camiseta blanca en la que se leía «Ánimo, Tito», un mensaje referido a Santiago Braojos, Tito, portero del equipo rojiblanco que el pasado jueves sufrió una pericarditis que le tendrá de baja lo que resta de temporada. La primera mitad del encuentro fue de dominio rojiblanco ante un adversario que contemporizaba en el centro del campo. El Torrijos llegaba bien a la frontal del área, pero allí se diluía su ofensiva. En el minuto 30 hubo una parada para la hidratación debido al fuerte calor reinante. En el minuto 37, Pedro Alonso cayó lesionado y fue sustituido por Alfonso.

Con la llegada del segundo tiempo, se adelantó pronto en el marcador el conjunto que dirige Ricardo Fajardo. En el minuto 50, Miguel Moreno controló un balón en largo ante la oposición de Ambo, se giró y soltó un buen disparo que batió a Berlana sin remisión. Era el 0-1, un tanto que enrabietó al cuadro local, que restableció la igualada en el minuto 55, tras un buen centro de Mario Espinar permitió a Alfonso llevar el balón a la red adelantándose a los centrales del conjunto quintanareño. Sin tiempo para el respiro, apenas un minuto más tarde, Juan Berlana sacó en largo sobre Álex Martín, la defensa del Quintanar del Rey se confió y el extremo toledano se hizo con el esférico para cruzarlo y batir a César de forma exquisita.

Lo más difícil estaba ya hecho, pero el Torrijos no solo aguantó bien las tímidas acciones ofensivas de su rival, sino que además certificó su triunfo con un tercer gol, obra de Cabañas tras recibir un pase de Óscar Cabo y hacerle un sombrero a César para batirle en el minuto 85. Con el pitido final hubo fiesta y despedida en las gradas del San Francisco por parte de una afición que siempre estuvo con el equipo, tanto en los momentos buenos, que los hubo en la primera vuelta, como en los malos ratos que llegaron ya en la recta final del campeonato.