El Ayuntamiento de Talavera va a renovar y ampliar el sistema de cámras de videovigilancia del tráfico instaladas en distintos puntos de la ciudad con una inversión de algo más de 131.000 euros. Con este fin, la Junta de Gobierno Local ha aprobado este jueves el expediente de contratación del contrato mixto para la renovación de las cámaras CCTV, hardware, software y comunicaciones de este sistema de videovigilancia del tráfico en la ciudad.

La actuación se enmarca en la Estrategia de Desarrollo Urbano, Sostenible e Integrado (EDUSI) de Talavera, que está cofinanciada en un 80% por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional. A través de esta invesión se va a renovar «todo el sistema de videovigilancia del tráfico», tanto las catorce cámaras instaladas en distintos puntos de la ciudad como las pantallas de la sala de control de tráfico ubicada en las dependencias de la Policía Local.

Así lo precisó en rueda de prensa la portavoz municipal, Flora Bellón, quien recordó que algunas de estas cámaras no funcionan y las que sí están activas «son obsoletas», con baja resolución que «dificulta mucho el reconocimiento de las matrículas o de las personas».

Por ello, estas catorce cámaras se van a sustituir por otras analógicas y se añadirán otras dos, una de ellas situada en el entorno del centro comercial Los Alfares y otra en la glorieta dedicada a los artesanos, en la avenida de Portugal. Asimismo, se renovarán las cuatro pantallas las dos televisiones de la sala de control, el hardware y el software para la grabación y reproducción de imágenes.

Este sistema se instaló hace años en la ciudad, si bien también desde hace tiempo muchas de las cámaras no funcionan, problema que se ha denunciado de manera recurrente en diferentes plenos municipales, donde desde la oposición se han interesado por esta cuestión.

Ahora, a través de esta inversión se renovará por completo este sistema, al que se sumarán algo más de una treintena de cámaras con la implantación de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) en el Casco Antiguo y en la calle Trinidad, donde se hará una primera fase que servirá de experiencia piloto.

En ambos casos, las cámaras contarán con identificador de matrículas y permitirán identificar a los conductores de tal manera que si se cometiera algún tipo de infracción podría sancionarse al autor. Asimismo, en el caso de la ZBE, este lector de matrículas permitirá el paso de los vehículos de residentes así como los de carga y descarga y los servicios de emergencia puedan acceder a pesar de las restricciones al tráfico en este espacio de la ciudad.

Tres nuevos vehículos. De otro lado, la portavoz informó de la aprobación de un expediente de contratación para el suministro en régimen de arrendamiento sin opción a compra de tres vehículos destinados a la Policía Local por un importe de 172.000 euros, IVA incluido. 

Bellón informó que dos de estos vehículos son todoterrenos y que irán dirigidos a los servicios de Medio Ambiente de Policía Local y a la brigada municipal de señalización. Como subrayó, estos tres nuevos vehículos se sumarán a los cuatro que se adquirieron el año pasado, tres turismos destinados a la Policía Local y un furgón para la Unidad de Atestados. 

En este sentido, la portavoz remarcó que desde el equipo de Gobierno han apostado por «ir renovando y reforzando los medios materiales y personales con los que cuenta la Policía Local». Así, recordó que la plantilla también se ha visto incrementada en cuatro plazas nuevas de oficial durante el año pasado y cinco nuevos agentes de cara a 2023. De esta manera, la plantilla ascenderá a 129 trabajadores a los que hay que añadir aquellos que deriven de los procesos selectivos que se están desarrollando para cubrir las vacantes. 

Asimismo, la portavoz indicó que a estas mejoras hay que añadir también el nuevo sistema de trabajo que se ha puesto en marcha para mejorar la conciliación de la vida laboral y familiar de estos empleados.