La empresa In Situ Conservación y Restauración SLU ha sido propuesta para ser la adjudicataria de la rehabilitación de la azulejería de la Basílica de Nuestra Señora del Prado. Lo hace por encima de los otros dos licitadores, Artectum S.L. e Iniciativas RFE S.L, a quienes ha superado en la puntuación en la última mesa de contratación, celebrada el pasado día 20.

In Situ Conversación y Restauración ha obtenido la segunda mejor puntuación en la oferta económica, con una mínima diferencia sobre la primera, mientras que ha obtenido el primer puesto en la oferta no valorable en cifras y porcentajes. La aprobación de esta propuesta por parte de la Junta de Gobierno Local, que se espera en los próximos días, será el último paso.

La restauración del pórtico del Prado es uno de los más importantes proyectos a los que se enfrenta la ciudad, atendiendo a la singularidad de la cerámica, fechada a mediados del siglo XVI, y en un pésimo estado de conservación desde hace años. Tanto es así, que en febrero de 2018 se tapó con vinilos que reproducen fielmente las escenas evangélicas de esta parte de la entrada del templo, bastante deteriorados también en los últimos tiempos.

Solo fue una medida provisional para la protección del mural, a la espera de la mejor solución para el pórtico exterior de la conocida como 'Capilla Sixtina de la Cerámica' que, debido a su complejidad y a la espera de la mejor solución, se ha retrasado más de lo esperado.

Una vez resuelta la adjudicación, y a falta de los últimos trámites administrativos, se espera pronto el inicio de los trabajos que devuelvan todo su esplendor a una de las más significativas obras de azulejería de cerámica talaverana, ubicada además en la Basílica del Prado, Bien de Interés Cultural (BIC) desde 1993. El templo se ubica en los Jardines del Prado, en este caso con declaración BIC con la categoría de Jardín Histórico desde 2019, y que también se encuentran ahora en pleno proceso integral de restauración.

Los trabajos de rehabilitación, que tienen un periodo de ejecución de cinco meses, se basarán en una rehabilitación integral, que incluye la restauración y conservación de la cerámica, y que cuenta con financiación de los fondos de la Estrategia EDUSI, a los que corresponderá un 80 por ciento del presupuesto aprobado.

Procedimiento. La rehabilitación contará con diferentes fases para lograr un resultado óptimo. Previamente al inicio de los mismos, se contará con un mapa de daños con las zonas más problemáticas, ya elaborado en 2018 por el restaurador de la Diputación, que analizó detalladamente el pórtico antes de ser protegido.

La intervención incluye la extracción de toda la azulejería, alrededor de 1.700 azulejos, que dejará 'desnudo' el muro del pórtico del Prado, en la que se considera una de las fases más complicadas. Se hará además un análisis físico y químico de la cerámica para determinar las patologías que presenta y su composición para, posteriormente, realizar calcos o fotogrametría de la azulejería para elaborar un inventario pormenorizado de cada uno de los azulejos que se tienen que extraer.

La limpieza y desalación de las piezas será una exigente tarea para los ceramistas encargados de la restauración, tras la que se iniciará la fase de consolidación de la azulejería, con la recomposición de los elementos que lo precisen y su fijación sobre paneles de nido de abeja, un soporte especialmente ligero, sobre el que se devolverá la cerámica al pórtico.

Según recoge el pliego de condiciones, los azulejos que faltan se realizarán siguiendo el patrón cromático y técnico de la azulejería original y con una pequeña letra R, que identificará que se trata de una réplica.