Villaluenga se afana en la limpieza de unas calles donde el fango permanece. Los estragos de la copiosa precipitación del pasado fin de semana siguen siendo visibles en buena parte del municipio; en cinco barrios de la localidad, según detalla el Ayuntamiento sagreño, la situación resulta especialmente delicada. Se trata de la zona de Campo de Oro, el entorno del instituto, el área del colegio, la Colonia Los Melgares y el céntrico paseo del Prado. Más de un centenar de viviendas han sufrido daños de diversa consideración, incluyendo inundaciones en las plantas bajas, sótanos o garajes. En algunos inmuebles, se derrumbaron muros y paredes.
Durante la madrugada del domingo al lunes, los equipos de salvamento rescataron a algunos vecinos próximos a la riada, junto al gran torrente que se concentró sobre el cauce del arroyo. «Ha sido lo nunca visto», cuenta Fernando Prieto, concejal de Comunicación del Ayuntamiento sagreño. La última tormenta que podría equipararse a la recién sufrida data de 2009, aunque en aquella los daños se concentraron en Campo de Oro y Los Melgares.
Además del trabajo de los vecinos, el Ayuntamiento participa de la limpieza a través de los medios municipales. Diferentes empresas de la localidad, además de otras radicadas en Pantoja, Recas e Illescas apoyan en las tareas de adecentamiento.
Estado de una de las calles de Villaluenga. - Foto: La Tribuna«La parte céntrica del pueblo está arrasada», explica Prieto. El paseo del Prado, una de las principales arterias de Villaluenga, ha quedado arrasado por el empuje del agua. Esta zona había sido reformada hace pocos años. «Era relativamente nueva», añade el responsable municipal.
Las carreteras que comunican la localidad con la autovía A-42 y con otros municipios de la comarca permanecen abiertas, mientras se ultima la apertura al tránsito de vehículos de todas las calles del núcleo urbano. El centro de salud, también afectado por el empuje de las lluvias, fue una de las primeras infraestructuras en ser adecuadas, lo que permite su uso a sanitarios y pacientes.
Para paliar los cortes de agua de las últimas horas, incidencia compartida en decenas de localidades de la provincia por una avería en la presa de Picadas, se ha habilitado un camión cisterna y se han repartido de garrafas de agua potable.