Los médicos de Toledo ven con buenos ojos las autobajas

Europa Press
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La presidenta del Colegio de Médicos de Toledo, Natividad Laín, ha dado su visto bueno a la propuesta del Ministerio de Sanidad para que los ciudadanos puedan gestionar bajas laborales de hasta tres días por enfermedad leve de manera autónoma

Archivo - Médica en Atención Primaria - JCCM - Archivo - Foto: JCCM

La presidenta del Colegio de Médicos de Toledo, Natividad Laín, ha dado su visto bueno a la propuesta del Ministerio de Sanidad para que los ciudadanos puedan gestionar bajas laborales de hasta tres días por enfermedad leve de manera autónoma, algo que "descargaría la Atención Primaria de burocracia" haciendo que los profesionales puedan dedicar más tiempo a lo asistencial.

En una entrevista con Europa Press, ha propuesto poner en marcha este sistema a modo de prueba y ver los resultados, confiada en que traería "más beneficios que perjuicios".

Ha dicho además que los ciudadanos "son más responsables de lo que pensamos" como ya demostraron en pandemia, "en una situación de alta gravedad".

"Sería un tema a considerar y tener en cuenta. Por lo menos, hay que probarlo. Desde mi punto de vista, creo que sería más útil de lo que nos pensamos, y tenemos que dar confianza a la población", ha señalado.

LAS MASCARILLAS, "EFICACES"

De igual modo, ha defendido la utilidad de las mascarillas en centros sanitarios, partiendo de la base que "todo el mundo es consciente de que las medidas que fueron eficaces en la primera parte de la pandemia fueron las de barrera, la distancia de seguridad y el lavado de manos" junto a la utilización de este material. "Salvaron vidas".

En este punto, ha recalcado que la mascarilla "evita contagios de todas las enfermedades respiratorias que se transmiten por vía aérea, y como es lógico, en esta época en la que las enfermedades respiratorias son lo que son, la recomendación es que donde hay más riesgo, se utilicen".

Algo que, a su entender, es "más evidente" en centros sanitarios, donde "hay más concentración de enfermos y pacientes vulnerables, y tienen mayor riesgo de contagiarse".

Esta obligación del Ministerio era en todo caso algo que "ya se hacía" en los centros médicos, donde los profesionales ya las usaban e instaban a pacientes a hacer lo propio.