Agentes de la Guardia Civil con destino en el Área de Investigación del Puesto Principal de Arganda del Rey han logrado, en la operación 'Gato con botas', la desmantelación de un grupo criminal formado por once individuos dedicado al robo con fuerza a camiones de mercancías estacionados en áreas de servicio de la provincia de Toledo.

La Guardia Civil inició la investigación en noviembre, cuando agentes del Puesto Principal de Arganda del Rey detuvieron a tres hombres que viajaban en un vehículo y transportaban una importante cantidad de calzado de una misma marca, del que no pudieron justificar su lícita procedencia.

Las posteriores pesquisas permitieron a los agentes identificar la mercancía como la sustraída de un remolque cuando estaba estacionado en un área de servicio de Cebolla.

El avance de la investigación permitió relacionar este hecho con otros cinco de similares características ocurridos en diferentes áreas de servicio de la provincia, y en el que el grupo criminal consiguió hacerse con neumáticos, productos de limpieza, droguería, ropa y electrodomésticos del interior de remolques de camiones estacionados en áreas de servicio.

El grupo criminal siempre actuaba de la misma manera: lo hacían de noche, utilizando para ello dos turismos y dos pequeños camiones para desplazarse a los diferentes aparcamientos de camiones de mercancías. Los automóviles eran usados como vehículo lanzadera y para cargar las mercancías que sustraían.

Cuando localizaban uno de su interés, rompían los precintos o las lonas para hacerse en pocos minutos con la mercancía y abandonar el lugar rápidamente.

El grupo estaba totalmente jerarquizado. Tres conseguían la logística de vehículos para desplazarse para cometer los ilícitos; otros tres recibían los objetos sustraídos y les daban salida en el mercado negro; por último, los cinco restantes robaban las mercancías del interior de los semirremolques de los camiones.

La Guardia Civil ha arrestado a siete individuos e investigado a otros cuatro más: diez hombres y una mujer de origen español y rumano, con edades comprendidas entre los 25 y los 55 años, a quienes se les imputan delitos de robo con fuerza en las cosas, de receptación y de pertenencia a grupo criminal.