Irene Sánchez-Escribano estrenará la pista el próximo 18 de mayo. Será en el Desafío Nerja 2023, en el estadio Enrique López Cuenca de la localidad malagueña. Lo cierto es que la toledana no tiene todavía una fecha concreta para correr su primer 3.000 obstáculos, así que el debut será con un 5.000 metros.
El único objetivo de la atleta del Adidas es tener una primera toma de contacto con el tartán y probarse después de muchas semanas de inactividad en cuanto a competición. Y es que, Sánchez-Escribano solamente ha participado en dos pruebas atléticas en vía urbana, 'Os 10.000 Peregrinos', en Santiago de Compostela, y los 10 kilómetros del Zurich Rock 'n' Roll Running Series de Madrid, hace unas semanas.
Han sido un par de meses en los que la corredora capitalina ha aprovechado para cargar las piernas de cara a un verano cargado de competiciones. Eso sí, Sánchez-Escribano buscará apoderarse de la mínima olímpica, con el objetivo de estar, esta vez sí, en los Juegos de París, que se celebrarán el año próximo en la capital francesa.
Además, en su agenda también está recuperar el cetro nacional de su distancia, los 3.000 obstáculos. Para ello, hay este año algo de respiro, pues el Campeonato de España Absoluto se ha retrasado a finales de julio, y será en la localidad valenciana de Torrente.
Por lo demás, espera lograr billete antes para el Campeonato de Europa, a celebrarse del 19 al 27 de agosto en Budapest (Hungría). Otros evento internacional al que podría acudir la toledana es el Campeonato de Europa de selecciones, previsto para el 24 y el 25 de junio en Chorzów (Polonia).