Los empleados de Gesmat recorrían el lunes las calles de Seseña poco después de atardecer cuando advirtieron una anomalía. Salía humo dentro de la carga de basura. Hacia las 21:45 de la noche, las tres toneladas que guardaba uno de los camiones del servicio público ardían; por ello, los trabajadores dependientes de la Diputación avisaron al servicio de emergencias 112 Castill-La Mancha para que las llamas quedaran contenidas y evitar la transmisión al vehículo.

Los trabajadores condujeron hasta el aparcamiento de la calle Lepanto de Seseña Nuevo para garantizar la seguridad por el volcado de las toneladas de basura. Entonces, los bomberos del Consorcio del parque de Illescas se desplazaron, junto con la agrupación de la Policía Local y de Protección Civil, para atender la incidencia.

El personal de la empresa pública seseñera Selymsa, especializada en la limpieza viaria, acudieron para redondear el servicio junto con la brigada municipal. Así, utilizaron una retroezcavadora para recoger las tres toneladas de basura y evitar que los niños del colegio público cercano y los vecinos de los bloques de vivienda tuvieran que ver los despojos.

«Estas tres toneladas de basuras se han incendiado por depositar incorrectamente residuos en uno de los contenedores, como ocurre con los restos de rescoldos de barbacoas», ha reprochado el Ayuntamiento de Seseña.

Tras la recogida, los voluntarios de Protección Civil hicieron un primer baldeo con agua a presión. El martes, hacia las siete de la mañana, el personal echó agua y productos jabonosos y recogió los restos.

«Rogamos a los vecinos que sean conscientes de las consecuencias de no utilizar correctamente los contenedores de residuos, no sólo por los daños al mobiliario público o por los gastos en horas extraordinarias que se ocasionan al Ayuntamiento con el dinero de todos, sino por el riesgo en el que se pone a las personas», explicó la Concejalía de Medio Ambiente.