2020 no ha terminado, pero para Lucas Búa ya es historia. Debía ser el de su confirmación, el de los Juegos Olímpicos... pero la pandemia del coronavirus ha mutilado los objetivos. Que no las ilusiones. Porque el toledano hace ya un par de semanas que se puso a entrenar con los ojos bien fijos en 2021 y Tokio. En enero cumplirá 27 años y, como reconoce, «tiene que ser uno de los años buenos de verdad».
El actual pintaba bastante bien cuando consiguió proclamarse de nuevo campeón de España en pista cubierta. Al menos, el corredor del FC Barcelona extrae lo positivo, y es que tiene «un año más» para prepararse. Ahora se encuentra en las semanas de añadir carga.
A partir de enero, llegarán las competiciones y será el momento de evaluarse otra vez. Lucas Búa tiene claro que quiere salir de España para competir para buscar eventos en los que pidan PCR, para sentirse más seguro.
Dentro de esta puesta a punto, Búa participará en una concentración en Tenerife junto al resto de compañeros de los 400 metros, donde se trabajará también la preparación para el relevo 4x400, en el que se tienen muchas esperanzas desde hace unos años y al que se quiere clasificar para los Juegos. Obviamente, como él mismo razona, «lo importante es que estemos bien individualmente, porque si no, no va a servir para nada».
Para la clasificación de cara a los 400 metros, la mínima es demasiado exigente (44.90), pero la Federación Internacional de Atletismo ha optado por combinar ese sitema de mínimas con el ránking de puntuación. Lógicamente, parece imposible que se asegure cubrir las 48 destinadas a los 400 metros lisos, así que habrá que tirar de una lista abierta desde el año pasado y en la que Lucas Búa está en el puesto 50, a dos de entrar entre los elegidos. «Con puntuar en un par de pruebas y estar en mi marca personal, parece que voy a entrar, así que está bastante encarrilado», explica.
Sea cual sea la evolución de la pandemia, parece que el Comité Olímpico Internacional va a celebrar los Juegos. Eso sí, no va a ser una cita olímpica al uso, y es algo que los deportistas van asumiendo. Como en casi todo, el atleta toledano prefiere ver el vaso medio lleno y, aunque no vivirá el ambiente habitual en una villa olímpica, se queda con que «van a ser unas Olimpiadas históricas».
2021 viene cargado de competiciones. En febrero está fijado el Campeonato de España en pista cubierta y a finales de marzo, se celebrará el Campeonato del Mundo, en la ciudad china de Nanjing. La duda está en descansar o no después porque habrá que encarar el billete para el relevo a una carta. Será en el Campeonato de Relevos que se disputará a principios de mayo en Chorzow (Polonia), donde los ocho mejores irán directamente a Tokio. Estados Unidos, Jamaica, Bélgica, Colombia, Trinidad y Tobago, Italia, Francia y Gran Bretaña ya se clasificaron en el Mundial de Doha del año pasado, así que tendrán menos motivos para acudir, por lo que el 4x400 español debería esforzarse en lograr una buena marca para agotar sus opciones por ránking si es que no lo consigue por puestos.