La UCLM plantea que Enfermería y Medicina compartan edificio

Hilario L Muñoz
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La universidad licita de forma externa la redacción del proyecto, lo que implica más de dos años para el comienzo de esta obra

La UCLM plantea que Enfermería y Medicina compartan edificio - Foto: Rueda Villaverde

La UCLM está trabajando ya en el desarrollo de un nuevo proyecto para la facultad de Medicina en Ciudad Real. Después de que se desistiera del anterior proceso de contratación de la obra, hace unos meses, desde el Vicerrectorado de Sostenibilidad e Infraestructuras se han iniciado los trámites para abrir un nuevo expediente desde la casilla de partida. Se trabaja con cambios respecto al anterior, al desarrollarse como un proyecto en el que estarán juntas la facultad de Medicina y la de Enfermería. Además, la redacción del proyecto constructivo se licitará, no se hará por los servicios técnicos de la universidad como el anterior. A estas dos novedades se suma que la UCLM, si no hay cambios, será la propietaria de los terrenos, toda vez que el Ayuntamiento de la ciudad tiene en exposición pública la cesión del suelo.

La vicerrectora de Sostenibilidad e Infraestructuras, Inmaculada Gallego, fue la encargada de explicar a La Tribuna ambas novedades que implican un nuevo proceso administrativo para la facultad de Medicina y la facultad de Enfermería, en lo relativo a docencia, además de mantener el Instituto de Biomedicina, en materia de investigación. En cuanto a la docencia existirán aulas y laboratorios docentes y en investigación, se prevén la apertura de laboratorios de investigación y el animalario. Los nuevos plazos, por términos administrativos y de ley de contratos, suponen algo más de dos años para el inicio de la obra y como mínimo tres más para que se pudiera impartir clase en el nuevo edificio, entre las obras y el equipamiento del inmueble.

«Ahora mismo ha acabado un proceso con el desistimiento del procedimiento de contratación de las obras». Se ha cerrado por una petición de un órgano independiente, la mesa de contratación, que encontró falta de definición en el proyecto constructivo, estaba en la fase de adjudicación. «El asunto es que esa necesidad sigue existiendo para la universidad» para lo que se va a desarrollar un nuevo proyecto por fases.

Antes de la primera fase, hay un trabajo previo, «acotando» todas las necesidades del futuro edificio. El equipo que está trabajando en la definición de estas necesidades está compuesto por expertos en docencia e investigación, tanto de la UCLM como de entidades externas, todas ellos asociadas al mundo de Ciencias de la Salud. Analizan las necesidades actuales y futuras, explicó la vicerrectora. La intención es desarrollar un edificio «autosostenible». Este será uno de los condicionantes del futuro proyecto.

Cuando estos aspectos estén definidos, llegará el momento de sacar a licitación la redacción del proyecto. Se licitará como un contrato externo para que «todos los consulting que lo decidan se presenten», explicó la vicerrectora. Esa licitación se quiere lanzar este año, lo que implicará, solo por los procesos administrativos, si no hubiera retrasos por diversos motivos durante el proceso, ese plazo de «dos años» por delante. «Hemos establecido nuestra hoja de ruta para tener unos hitos e ir cumpliendo, pero estamos sujetos a una legislación que nos va a condicionar», dijo Gallego. La vicerrectora señaló que hay una ley de contratos nueva, la de 2017, que limita los procedimientos, favorece la transparencia, la igualdad y la concurrencia, pero que también señala que hay que tener en cuenta el coste del ciclo de vida del inmueble. Por este motivo se saca a licitación la redacción del proyecto, porque cada euro invertido en esta fase puede suponer un ahorro muy relevante en las fases de construcción, mantenimiento y explotación del inmueble.

Este proceso para construir la facultad de Medicina en Ciudad Real es ya el tercero. El primero se paralizó con la crisis de 2011, y el segundo no llegó a lanzarse, por los problemas advertidos en la mesa de contratación. La vicerrectora señala que este proceso «hay que verlo con mucha responsabilidad» porque «se ha tomado una decisión muy dura al parar el proceso».