La comisión de Hacienda volvió al Ayuntamiento esta mañana con una sesión más sosegada, sobre todo, por el cambio de rumbo y el fin del conflicto generado por la imposibilidad de que los grupos políticos pudieran debatir, aportar mociones y votar sobre impuestos y tasas que no vayan a sufrir variación el próximo año.
La sesión del lunes acabó por dejar este punto del orden del día encima de la mesa tras las discrepancias de Ciudadanos y el PP en relación al reglamento y la interpretación del secretario del Pleno, que aseguró en varias ocasiones que únicamente se podían presentar enmiendas al proyecto que el equipo de Gobierno varíe de cara al próximo ejercicio. La petición de un informe jurídico del portavoz de Cs, Esteban Paños, y la protesta del viceportavoz del PP municipal, José López Gamarra, por no haberse cumplido el tiempo legal que marca la Ley de Procedimiento Administrativo para informar a los grupos terminaron abortando la comisión.
Si bien, la convocatoria de esta mañana fue mucho más tranquila y ágil, con un resultado que ya sospechaba la oposición el lunes, la aprobación del trámite del proyecto de ordenanzas planteado por el PSOE y una única enmienda de los grupos aceptada, la de IU-Podemos relativa al incremento de tarifa para los cajeros que operan en la vía pública. La decepción se puso de manifiesto a la salida de la comisión por los principales partidos de la oposición. Txema Fernández, consideró que el PSOE ha sacado adelante su proyecto «con un aprobado raspado» gracias al respaldo de Luis Miguel Núñez, el concejal no adscrito, que fue el único que levantó la mano a favor, una postura que remarcó Esteban Paños, de Ciudadanos, por una cuestión ideológica al ser el edil «que viene de Vox».
El portavoz de IU-Podemos valoró que se haya aprobado una de sus propuestas, la única de las aportadas por los grupos de la oposición, y se incremente de 100 a 572 euros anuales la tarifa a pagar por los cajeros de las entidades bancarias a pie de calle. Pero subrayó a la salida que no ha sido suficiente porque se sigue sin incluir en las ordenanzas el pago del IBI a la Iglesia, que se traduce en «querer dejar de ingresar una cantiad de dinero que no nos podemos permitir los toledanos», sobre todo, ahora que el equipo de Gobierno también ha decidido pagar la deuda a los bancos en lugar de destinar ese dinero a la ciudad en ese momento económico tan delicado.
Todo indica que en el Pleno extraordinario que se celebra hoy se aprobará inicialmente el proyecto de ordenanzas fiscales que aporta el PSOE y lo hará con el mismo apoyo que en la comisión de Hacienda, dado que Fernández ya ha anunciado su abstención.
Ciudadanos también se fue con lo puesto ayer pese a sus 18 propuestas, algo que ya avanzó Esteban Paños el lunes porque tenía claro que resulta complicado que el PSOE apoye las enmiendas de los grupos. Lleva tiempo avisando que la presión fiscal seguirá subiendo a pesar de las circunstancias actuales y cree que el Ayuntamiento tenía margen suficiente para bajar los impuestos contando con recursos como el millón y medio de euros de IBI del hospital, entre otros. Además, Paños apuesta por el consenso y reconoce que una vez más el PSOE no da muestras de ello.
La misma postura comparte el PP sobre la presión fiscal. Amparo Granell aludió a la «medida estrella» del equipo de Gobierno, «la bajada del 0,05% en el IBI, es decir, unos 150.000 euros», una rebaja insuficiente, sobre todo, teniendo en cuenta que el presupuesto municipal suele acercarse a los 100 millones de euros. El grupo buscaba que se aliviara la presión fiscal el próximo año y critica al PSOE por «no ayudar» a los toledanos a pesar de las circunstancias que está dejando el coronavirus.
la sesión La convocatoria se desarrolló con relativa rapidez aunque duró hora y media. La concejala de Hacienda inició la comisión apuntando que se seguiría el procedimiento de años anteriores y se podrían votar todas la enmiendas, con lo que se inició la votación sin más con la enmienda a la totalidad presentada por el PP, que no contó con apoyos. En algunos momentos intervinieron los técnicos para puntualizar o aclarar algunos aspectos de las propuestas, pero sin más porque no obtuvieron votos suficientes.