Superando errores
cabalito
nacho ruiz
Y a hemos pasado el Ecuador de la legislatura tanto en lo nacional, regional y municipal y, sí, ya estamos de precampaña.
El dinero de Europa que en 2020 nos concedieron para poder salir del inmenso atolladero en el que nos metió la pandemia ha tenido muchos problemas para poder llegar, no por Europa, sino por los errores cometidos por las administraciones española y, socialista, para más señas.
Pero por arte de birlibirloque se ha solucionado el procedimiento para que la precampaña esté dopada con miles de millones europeos para que Sánchez pueda jugar sus cartas de cabildeo para intentar mantenerse en Moncloa. Ha sido una casualidad el que los primeros 10 mil millones lleguen justo en el momento en el que los contagios nos tienen a todos más pendientes de los test de antígenos y las PCR que del destino y destinatarios de tal lluvia de millones.
Será que soy un mal pensado y creo ver redes clientelares similares a las que tiene Page en Castilla-La Mancha o Tolón en Toledo. Esas redes por las que los contratos millonarios recaerán en los amiguetes. Mientras, el presupuesto con superávit, aunque seguimos teniendo una de las presiones fiscales más altas de la Península Ibérica.
Me decían el otro día que una administración pública con superávit es imposible, porque la suma de ingresos y gastos ha de dar cero redondo. Todo puede ser, me decía mi interlocutor, que haya un exceso de ingresos con respecto a las necesidades de la administración local, o no se han ejecutado las partidas presupuestarias de manera adecuada, es decir, se han cometido errores en la gestión de los fondos públicos por parte del grupo de gobierno.
La solución que me daba era también de doble vía, reducir la cantidad ingresada por impuestos para adecuarla a la capacidad y necesidades que los servicios públicos precisan o, de otro lado, corregir el modo en el que se gestionan las partidas para ejecutar lo presupuestado y dar correcta y adecuadamente los servicios públicos necesarios.
Esas son las premisas, muy básicas, para que un Futuro Alcalde de Toledo (FAT) tenga claro hacia donde tiene que encaminar sus propuestas para una ciudad que ansía un cambio en la gestión y el color en el gobierno municipal. Menos impuestos y mejor gestión.