El Ayuntamiento de Toledo ha autorizado a Cáritas a instalar contenedores para ropa usada en La Legua, en torno del nuevo Hospital y Plaza de Toros. Ramón Lorente, concejal de Limpieza Viaria y Mantenimiento de Centros Municipales, dice que además estudian y están abiertos a hacer lo mismo en otros puntos de la ciudad. El programa de recogida de ropa usada ayuda a cuidar el medio ambiente, facilita prendas a personas necesitadas a través de las parroquias y crea empleo ya que la recogida y clasificación lo hace Inserta Toledo donde 18 personas en exclusión tienen puestos de trabajo, la mayoría procedentes de los servicios sociales de la capital, y también la tienda Moda Re da dos empleos, según explica Mónica Moreno, secretaria general de Cáritas.

Lorente ha visitado el centro Beato Sancha y destaca los resultados óptimos que da el convenio contenedores con Toledo a la cabeza nacional de la reutilización. En la capital hay 25 contenedores rojos en todos los barrios y en lugares visibles ya consolidados como referente de una labor social y de cuidado del medio ambiente. En ellos se han recogido desde 2019 mil toneladas ( 255.140 en 2020 y 301 toneladas en 2021, lo que supone el 18% del total de residuos). Se da la circunstancia de que la cuidad es muy activa y mientras en toda Castilla-La Mancha se recoge 1,73 kilos por habitante en Toledo se llega a 3,5 kilos. En general, la recogida selectiva se adelanta cinco años a la normativa europea, indica Lorente.

El residuo textil es un reto en la UE ya que aumenta un 40% y cada habitante compra 26 kilos y se deshace de 11. De la cantidad desechada la mayoría es icinerada y programas como el de Cáritas suponen acelerar la transición a la economía circular respaldado pro el Ayuntamiento y su convenio Cáritas.