Cientos de árboles del conocido como ‘Pinar de Almorox’ han resultado dañados por la nevada al desprenderse ramas o caer los ejemplares por el peso de este elemento natural. «Es desolador. Es incalculable», insistía ayer a este diario el alcalde de esta localidad de la comarca de Torrijos, José Martínez, sobre esta superficie de 2.900 hectáreas. Unos 20 agentes entre voluntarios de Protección Civil y personal del Ayuntamiento trabajaba ayer para limpiar los desperfectos ocasionados por el temporal ‘Filomena’.
«Continuamos con labores de limpieza de nuestro querido pinar, que ha quedado bastante desastroso después de la borrasca ‘Filomena’. Queda mucho trabajo por delante, pero poco a poco todo volverá a la normalidad», informaba ayer el Ayuntamiento a los 2.100 vecinos de esta localidad limítrofe con la de Ávila.
La caída de las ramas y de los árboles han ocasionado cuantiosos daños en los tejados de las viviendas, los porches, las vallas, las farolas o en los tendidos telefónicos y de alumbrado de las urbanizaciones ubicados en el Pinar de Almorox, que constan de 400 viviendas, parte de ellas ocupadas todo el año y otras utilizadas como segunda residencia. El Ayuntamiento consiguió inmediatamente limpiar las calles de la urbanización y del núcleo urbano para facilitar el tránsito por ellas.
«El pinar es importantísimo. Es una fuente de riqueza para Almorox», recalca el alcalde sobre el vínculo con este área medioambiental que proporciona trabajo a muchos vecinos. El Ayuntamiento de Almorox detalla sobre este pinar, cuyo origen el alcalde remonta a hace unos 500 años, que se puede encontrar en él ecosistemas muy bien conservados gracias al aprovechamiento sostenible de sus recursos naturales, en los que se integran masas forestales formadas por pinos piñoneros y encinas.
El Pinar de Almorox es un lugar muy apreciado para el municipio por su explotación y lugar de recreo, así como por su importancia como espacio Red Natura 2000, que comprende zona ZEPA (Zona Especial Protección Aves) y LIC (Lugar de Importancia Comunitaria) Sierra de San Vicente y valles del Tiétar y Alberche. Según informa el Consistorio, es además zona o área crítica de la cigüeña negra, del águila imperial y buitre negro, siendo un buen punto para la observación de aves.
Se trata de un monte de utilidad publica (MUP) por satisfacer necesidades de interés general y desempeñar funciones de carácter protector, social y/o ambiental. Tradicionalmente, los usos forestales desarrollados han sido: aprovechamiento de madera, piñas, pastos, cinegético, apícola y uso recreativo sostenible.