160 personas pendientes de programas y trabajos comunitarios

Lola Morán Fdez.
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En Talavera, tan solo son unas 5 las entidades que facilitan esta posibilidad, entre ellas la Asociación Marillac, que ha atendido desde sus inicios en la ciudad en 2016 a unas 150 personas

160 personas pendientes de programas y trabajos comunitarios

Alrededor de 160 personas de Talavera están a la espera de poder cumplir una sentencia judicial mediante la realización de programas o con jornadas de servicios comunitarios en entidades o instituciones, si bien tan solo son unas cinco las que ofrecen esta posibilidad en estos momentos. Una de ellas es la Asociación Marillac, que surge de las Hijas de la Caridad en 1991 y que cuenta con delegación en Talavera desde el año 2016 en la calle Adalid Meneses, 2, en las instalaciones del antiguo colegio de La Milagrosa.

Allí se desarrolla el proyecto ‘Ser-Apoyo’, como explicó a La Tribuna Carmen Martínez de Toda, trabajadora social, Hija de la Caridad y coordinadora del proyecto en Talavera, que ha trabajado más de 20 años en el ámbito penitenciario, donde ha conocido de primera mano la problemática de los presos  y sus familias así como las «nuevas alternativas» a la prisión en el Código Penal de 2015.

Al comprobar que en Talavera «no había una respuesta a una problemática que tenían ciudadanos de Talavera y su comarca», se puso en marcha un recurso de la mano de esta asociación, la única en la provincia y en la región dedicada de manera específica a este ámbito.

Los dos primeros años se llevó a cabo el programa ‘Ser-Apoyo’, que incluía el apoyo a todas las personas y familias con algún proceso judicial pendiente o en la cárcel, así como a aquellas que necesitaban asesoramiento. Se hizo al tener constancia además de que había en torno a 200 personas con sentencias pendientes de cumplir, tras haberles permitido sustituir la pena de prisión por trabajos en beneficio de la comunidad (TBC). Algunas incluso llevaban hasta más de seis años esperando «que una entidad les acogiera para hacer los trabajos», ya que «no había ni asociaciones ni entidades» donde poder hacerlo. 

Se detectó que, en torno a esto, existía además una problemática social puesto que los afectados eran en su mayoría personas vulnerables o en riesgo de exclusión social, lo que hacía que «por sí solas, gestionar todo el tema judicial».

De ahí fueron surgiendo una serie de respuestas y se puso en marcha el proyecto ‘Impulso social’, que busca atender «todas las necesidades, ya no solamente del mundo de prisión, sino de las familias que están en torno a esta problemática».

Otro de los objetivos a la hora de poner en marcha este recurso fue «dar respuesta a la falta de comunicación que había entre Talavera y la prisión de Ocaña», hasta donde tenían que ir estas personas para que les comunicaran cómo debían sustituir sus penas de cárcel, y no tenían medios para desplazarse hasta allí.

De la mano del programa ‘Ser-Apoyo’, la asociación cuenta con un espacio en los juzgados de Talavera una vez al mes para que estas citaciones se hicieran mediante videoconferencia. Una medida que ha funcionado hasta el inicio de la pandemia, si bien desde la entidad se ha gestionado con la prisión la posibilidad de que la propia asociación ejerza de «mediadora» y ceder así sus instalaciones para que sean citados allí por videoconferencia desde el próximo septiembre.

«Poca sensibilización». Martínez manifestó que en Talavera «hay muy poca sensibilización» tanto en entidades públicas como privadas a la hora de ofrecer plazas para estos TBC. Así, apuntó que tan solo hay alrededor de 5 entidades en Talavera que tienen una plaza de estas características.

Según los datos que maneja la asociación, son en torno a 160 personas de Talavera las que están a la espera de poder cumplir su sentencia o bien haciendo programas o con jornadas de servicios comunitarios.

La coordinadora animó a las personas y familias que estén en esta situación a recurrir a la asociación, algo que en ocasiones no se hace «por vergüenza». Sobre esta cuestión, informó que además de atender de manera presencial se puede llamar al teléfono o enviar un WhatsApp al 672 67 15 66, y contactar también mediante el correo electrónico serapoyotalavera@asociacionmarillac.org. El horario de atención presencial es de lunes a viernes de 9 a 13 horas así como lunes y miércoles de 17 a 19 horas, bajo cita previa.

La asociación ofrece programas y una plaza de TBC a estas personas. En el caso de los programas, se realizan en grupos de no más de diez personas  en estos momentos por la reducción de aforo, con lo que a lo largo del año pasan por allí más de una treintena de personas, dada la duración de los cursos.

A ello se suma la atención a personas que acuden en busca de información o asesoramiento. En total, desde el año 2016 que se puso en marcha la asociación en la ciudad, serán alrededor de 150 las personas que han atendido en la entidad, tanto de forma directa como a familiares de quienes precisan este tipo de servicio.