Christian López no las tenía todas consigo. Sabía que podía, pero con reservas. Al final, después de dos intentos, lo consiguió. El atleta de Cabañas de la Sagra ya tiene el récord Guinness del mayor tiempo sosteniendo una motosierra sobre su frente. A falta de validación, lo ha dejado en 6 minutos y 48 segundos, por lo que superó con creces los 5 minutos y 1 segundo del norteamericano David Rush.

El escenario escogido fueron los exteriores de la ferretería Díaz, en Illescas, empresa que le ha proporcionado el artilugio que tuvo que mantener en equilibrio y que pesa algo más de cuatro kilos. Escogió realizarlo al aire libre para tener referencias con la mirada, aunque tuvo que reponerse a un primer intento, en el que no pasó de los tres minutos.

«Es un reto muy difícil, quizás el más difícil de los que he hecho», reconoce el toledano, que apenas contaba con referencias de la motosierra, con los riesgos que eso conlleva: «No veía ni los dientes». Además, tuvo que hacer frente al viento, que le puso en aprietos en varias ocasiones a la hora de mantener en equilibrio la maquinaria. Aún así, López está convencido de que puede dar más en este récord y, por eso, no descarta más tentativas para poner el techo todavía más elevado.

Motosierra en la frente, reto superadoY es que, si hay algo que caracteriza al corredor cabañil es su tesón. «Tuve fe y lo logré, hacer ese tiempo es una proeza, mucho más difícil que el de la bicicleta por la inestabilidad», insiste. Es el récord número 66, en su intento de ser la persona con más Guinness en su poder, para desbancar así al estadounidense Ashrita Furman, que ostenta ahora mismo más de 200, aunque llegó a conseguir unos 600. Un techo al que Christian López quiere acercarse.

En la jornada de mañana sábado, Christian López va a intentar su siguiente récord Guinness. Será en Calpe, en el hotel Suitopía, e intentará subir más de cien pisos con muletas en una hora. Son las condiciones que le piden desde Guinness World Records, además de una altura y un ancho de los escalones, que solo cumplía este edificio.

En principio, tampoco puede subirlos de dos en dos, tiene que ser de uno en uno, algo que añade dificultad. «Tengo que estar muy pendiente para no perder el equilibrio», recuerda el recordman. Sus entrenamientos en el Miradero de Toledo le han permitido acudir preparado, así que solo queda intentarlo y superarlo. Como siempre estando el toledano de por medio.