Los bomberos de Toledo no paran desde que se produjo la gran nevada. Una de las últimas intervenciones les llevó ayer a desplazarse hasta la estación de autobuses por la tarde por una alerta relacionada con un intenso humo. Los efectivos llegaron con rapidez y desalojaron a los pasajeros y a las personas vulnerables y sin techo que continúan cobijadas en la estación por la ola de frío. El suceso tuvo su origen en la manera de intentar descongelar las tuberías. Según relatan los bomberos, se echó fuego para intentar calentarlas y la estación terminó llenándose de humo, con lo que hubo que actuar con rapidez y sacar de allí a todas las personas. El hecho se quedó en un susto, pero los efectivos llaman la atención sobre este tipo de situaciones y recomiendan no sobrecargar los generadores de temperatura para evitar riesgos innecesarios.
Los bomberos continúan esforzándose desde hace días para intentar que Toledo recobre la normalidad. Es frecuente encontrarse a los efectivos en cornisas y cubiertas para retirar placas de hielo y carámbanos que ponen en peligro la seguridad ciudadana, entre otras actuaciones.