Habrá más imágenes, pero la isla ha cambiado para siempre. Mediaset España estrenará próximamente una nueva temporada de La isla de las tentaciones en la que cinco parejas vivirán de nuevo en el paraíso, junto a 10 solteras y 10 solteros dispuestos a enamorarse y en la que Sandra Barneda será nuevamente la maestra de ceremonias.
Vuelven las hogueras, las noches interminables , las conquistas, las sorpresas y las citas de ensueño; aunque también lo hacen las infidelidades, las traiciones, las mentiras, las decepciones y, cómo no, el amor. Pero las nuevas entregas traerán más tentaciones, más celos, más desconfianza y multitud de novedades que harán que nada vuelva a ser como era antes en el paradisiaco enclave del programa. Entre ellas, la luz de la tentación, un nuevo elemento que alterará la tranquilidad de los concursantes.
En su llegada a la isla, cada miembro deberá marcar el límite que no está dispuesto a permitir cruzar a su pareja en su paso por el programa, la línea roja que podría sentenciar el futuro de la relación. Cada vez que alguien ose rebasar ese límite por primera vez, una luz se encenderá y una sirena sonará en la otra villa. De esta manera, los participantes tendrán un aviso de que algo grave ha pasado al otro lado, pero no sabrán quién ha sido el responsable ni qué es lo que ha hecho.
Realizado en colaboración con Cuarzo Producciones, La isla de las tentaciones marcó un hito televisivo y se convirtió en un fenómeno social con su temporada de estreno, en la que marcó un rotundo 22,3 por ciento de share y 2,8 millones de espectadores. En su segunda edición, el formato se superó a sí mismo y experimentó una evolución ascendente hasta obtener en su última gala un 28 por ciento de cuota de pantalla y 3,4 millones de televidentes.
Líder indiscutible
Con una media acumulada de 2,9 millones espectadores (22,1 por ciento), la segunda edición también fue líder indiscutible de su franja de emisión, superando en nueve puntos a la oferta de Antena 3 (13,1 por ciento). En target comercial creció hasta el 27,9 por ciento y disparó sus registros entre los jóvenes, con un 46,7 por ciento de share en el segmento entre los 13 y 24 años y un 41,1 por ciento entre la edad de 25 y 34, unos datos que convirtieron el espacio en el programa no deportivo más visto de la temporada, solo superada posteriormente por Cantora: la herencia envenenada.