Los sindicatos CCOO y UGT se han concentrado una vez más en la plaza de Zocodover con el lema ‘Ahora sí toca’ para que el Gobierno de España reanude el diálogo social. «Todavía hay muchas personas que no cubren sus necesidades básicas, lo vemos en las colas del hambre para recibir alimentos», comentó a los medios de comunicación sobre los efectos económicos de la pandemia de la Covid-19 la secretaria de Acción Sindical y Salud Laboral de CCOO, Nuria Garrido. Y apostilló: «Es indispensable una legislación que refuerce la dignidad del mundo del trabajo».

Garrido hizo hincapié en que la pandemia y sus efectos no pueden convertirse en «la excusa» para evitar la convocatoria de mesas de diálogo social paralizadas desde marzo de 2020. «Exigimos la derogación de las reformas laborales, la derogación de las reformas de las pensiones de 2013 y la subida del salario mínimo interprofesional», abundó la representante de CCOO. En este sentido, añadió que la utilización de la reforma laboral, que devalúa el empleo y los salarios resulta, «perjudicial» para el futuro. «No es justo usar la crisis generada por la pandemia para castigar a las personas más vulnerables», aseveró a continuación.

Así, llamó al cumplimiento de las promesas electorales del Gobierno. «Si no, seguiremos movilizándonos todos los meses. Nadie nos ha regalado nada, ni va a regalarnos nada si no nos movilizamos», recalcó.

Por su parte, la secretaria general de UGT Castilla-La Mancha, Olga Arribas, incidió en que «hay que sumar esfuerzos» para que la precariedad en el mercado de trabajo «no se encone aún más». «La temporalidad y las malas condiciones no pueden seguir siendo la tónica dominante. En CLM, el 30 por ciento de las personas está en riesgo de pobreza o exclusión social. Somos una de las regiones con uno de los mayores índices de pobreza de todo el país. El 30 por ciento de las personas no es que lleguen apurados a fin de mes, sino que ni siquisiera llegan ni a pagar las facturas ni a cumplimentar toda su bolsa de la compra», apuntó.

Arribas destacó que los sindicatos han tejido tras la crisis por la pandemia una red de protección social que ha permitido la pervivencia de miles de empresas y la conservación de milllones de puestos de trabajo. «En CLM, el 4,2 de la población en riesgo de pobreza está cubierta por el Ingreso Mínimo Vital», lamentó.