Tras la muerte, ayer del trabajador de 50 años en Talavera, al golpearse en la cabeza con un cazo-pala cuando estaba realizando labores de mantenimiento, CCOO-Toledo ha procedido hoy a poner la denuncia ante la Inspección de Trabajo, “como siempre hacemos cada vez que hay un accidente mortal”, indica Nuria Garrido, secretaria de Salud Laboral de CCOO-Toledo.

“Desde CCOO tenemos gran preocupación, porque pese a la caída de actividad (ERTES) los accidentes mortales están aumentando. El año 2020 terminó con 17 accidentes mortales, siete más que en el 2019.”

“No podemos permitirnos un relajamiento de las medidas preventivas y exigimos a los empresarios que cumplan con la LPRL y a las administraciones públicas que controlen que se cumpla.”

Por otro lado, valoramos la labor de los delegados/as de prevención en las empresas, puesto que donde tiene presencia el sindicato, está demostrado que hay menos accidentes laborales.

Todos los accidentes tienen su origen en la falta o incumplimiento de medidas de seguridad, subraya Garrido

“Volveremos a retomar las concentraciones que hacíamos antes de la pandemia cada vez que que ocurría un accidente mortal, dando visibilidad a esta lacra que tantas vidas se está llevando. Porque no es de recibo que las personas trabajadoras vayamos a ganarnos la vida al puesto de trabajo y la perdamos.”