El cómico y actor castellano Leo Harlem nació en un pequeño pueblo de León pero creció, y vivió, en Valladolid hasta que sus dotes de cómico le llevaron a instalarse en Madrid en 2003. Desde entonces, este todoterreno de la risa ha hecho radio, televisión y, últimamente, mucho cine. En la comedia Superagente Makey encarna a un concienzudo policía municipal de Madrid que acaba destinado en Estepona. 

¿Qué cosas ha hecho gracias a Makey y que nunca pensó iba a atreverse a hacer en el cine?

Gracias a Makey he intervenido en varias escenas de acción, he aprendido a disparar (para ello dí unas cuantas lecciones), y alguna cosita más que no me esperaba.

Makey es campechano, familiar y obsesivo en el cumplimiento de la Ley. ¿Se siente identificado con él?

Sí, soy una persona que me gusta que se respeten las normas, lo considero fundamental y, aunque es un personaje de ficción, tenemos esa similitud.

 
En una entrevista ha declarado que es más fácil hacer humor con calor que con frío, sin embargo usted es leonés, tierra precisamente no muy cálida. ¿Es usted la excepción que confirma la regla?

Hay gracia en todas partes, lo que ocurre es que cuando hay mejor clima en una zona es más fácil sociabilizar con la gente que cuando las personas están más recluidas por el frío.

En ese contexto, ¿se imagina rodar una película en Burgos en pleno invierno? ¿Les saldría divertida?

Sería un buen argumento: gente del norte haciendo cosas que hacen los del sur de España. Imagínate en esas circunstancias la dulzaina o el tamboril. Pero de ahí también surge el humor, cuando las personas hacen cosas que no se prevén.

¿Qué criterios sigue para elegir un papel en el cine?

Normalmente te ofrecen los guiones en función de las posibilidades que tengas de hacerlos y de que te gusten. A mí me agrada todo lo que sea comedia además, si hay algo de acción como en Makey pués fenomenal, en este género me encuentro muy cómodo. 

Santiago Segura le dio su primera oportunidad en la gran pantalla en Torrente 5 y ha seguido colaborando con él en Padre no hay más que uno. Deduzco que se entienden bien…

La primera vez que yo salí en el cine, en Torrente, fue en un papel muy pequeño, acompañado de Chiquito de la Calzada, y donde interpretábamos a una pareja de vigilantes de seguridad. Santiago Segura me llamó, y me hizo ilusión, porque las películas de Torrente son corales y muy divertidas. Pero realmente quien me dio un papel importante fue Nacho Velilla en la comedia Villaviciosa de al lado.

¿El agente Makey ha llegado para quedarse?

Sí, me han comentado si no me importaría rodar una secuela porque el personaje tiene recorrido, porque se puede exportar, y hacer otra película en cualquier parte del mundo, por ejemplo, en Nueva York.

Su personaje es un amante de las películas de acción. De hecho, hace un pequeño homenaje a ese tipo de películas de los años 80 como Arma Letal. ¿Personalmente es aficionado a ese tipo de filmes?

Me gustan películas de todos los géneros. Y dentro de cada uno, las hay de más y menos calidad, o simplemente que te gustan. Este tipo de cine como Arma letal, y sus secuelas, son de simple entretenimiento, que no tienen más objetivo que la gente pase un buen rato.