El Partido Castellano-Tierra Comunera ha celebrado de forma online su tradicional homenaje a los comuneros en Toledo. El presidente de la formación, Pedro Manuel Soriano, ha cifrado en unos «24.000 muertos castellanos» el coste en vidas de la pandemia de Covid-19 para el territorio histórico. Así, y asumiendo los 60.000 fallecidos que se han contabilizado en el conjunto de España por esta razón desde marzo de 2020, el 40% del total correspondería con su vasta zona central. «Algo están haciendo rematadamente mal los gestores sanitarios de las comunidades autónomas», ha proclamado Soriano.

El acto ha tenido como figura homenejeada a María Pacheco, otra de las «figuras olvidadas en su propia ciudad». El PCAS exige que se erija con la mayor celeridad posible una estatua de esta mujer «junto a su marido» en la toledana plaza Padilla. Además, en su intervención, el máximo dirigente del partido ha vuelto a reclamar la unidad de Castilla dentro de una España federal y ha exigido el fin del trasvase Tajo-Segura, un «caballo de batalla» transversal para los intereses castellanos. «Seguimos viendo como el Tajo a su paso por Toledo sigue siendo una cloaca a cielo abierto, mientras el agua limpia lo aprovechan a 300 o 400 kilómetros».

La estrategia contra la pérdida de población es otro de los grandes retos que afronta el interior peninsular. «Nuestros pueblos se están vaciando pero es que también lo están haciendo las capitales de provincia», ha indicado Soriano, quien se ha referido a la despoblación como «un problema estructural de Castilla-La Mancha, que ha de recoger dentro del Estatuto de Autonomía». El castellanismo plantea una reforma del texto legal que incorpore esta cuestión en su articulado.