En la pasada reunión del Consejo Rector del Patronato del Teatro de Rojas también se abordaron las cuestiones relativas al personal del espacio tramitando «las solicitudes reclamadas por la plantilla tanto en la estabilización de dos puestos de trabajo como en el proceso de jubilación anticipada parcial». Teo García se refirió a este asunto apuntando que se ha logrado «una fase de cierta normalidad en cuento a las relaciones laborales».

De ahí que destacara, sobre los procesos de judicialización abiertos en estos sentidos, que «esta haya sido la única solución» ya que «no puedo decir que me sienta satisfecho» de las sentencias -tanto del Contencioso como del Social- que, por cierto, dan la razón a la forma de proceder el Patronato del Rojas. Lo apuntó así porque el responsable de Cultura en el Ayuntamiento apreció que «la mejor solución siempre es la dialogada y convenida con los trabajadores».

Hay que recordar que el Juzgado de lo Social Número 1 de Toledo absolvió al Patronato de la demanda interpuesta por tres trabajadores de plantilla que reclamaban el pago de horas extraordinarias presuntamente realizadas durante los años 2016, 2017 y 2018 por valor de 6.346 euros, 3.188 euros y 4.715 euros, respectivamente. El problema es que el cómputo de horas anuales que toman como referencia contravenía la legislación nacional y su eficacia ya estaba suspendida. Fueron tres trabajadores a tiempo completo que ocupan los puestos de jefe técnico, técnico tramoyista y técnico de sonido, con antigüedad en la empresa desde mayo de 1987, febrero de 1994 y julio de 1989.

Por igualdad y justicia. Sobre la decisión de crear la Unidad de Gestión Contable -por acuerdo unánime de todos los grupos- que ha llevado aparejado la modificación de la Relación de Puestos de Trabajo, afirmó Teo García su compromiso de acabar con «la situación de desigualdad con la que se estaba tratando a los trabajadores del Rojas con respecto a los funcionarios del Consistorio».

Por ello, justificó la medida confirmando que «las funciones y atribuciones de un Grupo A son las que  se han planteado con el dictamen favorable de todos los técnicos». Así, y saliendo al paso de algunas críticas políticas, fue tajante a la hora de decir que «no voy a consentir que se demonice a ningún trabajador o a ninguna empresa que gestione legalmente el Teatro». Porque, reiteró, «no voy a consentir que los trabajadores del Rojas sean de tercera categoría» ya que «deben tener el mismo tratamiento que los del Ayuntamiento».