El Ayuntamiento de Talavera ha puesto en marcha una experiencia piloto en materia medioambiental que pretende impulsar la creación de zonas verdes de bajo consumo de agua. Como explicó a La Tribuna el concejal de Política Medioambiental Sostenible, Sergio de la Llave, esta iniciativa está encaminada a los principios de xerojardinería, que pasan por diseñar y construir jardines con bajo consumo de agua.

Con este fin, se ha puesto en marcha una primera acción a través de la cual se ha reconvertido un parterre de césped en una zona con pavimento de gravilla en la que se han plantado rosales y lauros, a los que se sumarán más adelante varios árboles que precisan un bajo consumo de agua.

Se trata de un espacio donde había filtraciones de agua y pérdidas importantes y donde además se había vandalizado el riego en varias ocasiones, con el robo del programador, daños en el sistema y el forzado de la arqueta.

Por todo ello, desde la Concejalía de Medio Ambiente, valorando el coste y la sostenibilidad del espacio, dado el elevado consumo de agua a causa de las filtraciones, se ha optado por esta experiencia piloto que pretende extenderse a otros puntos de la ciudad.

Como señaló el concejal, esta iniciativa está ligada de igual manera al Estudio Espacial del Arbolado que se ha llevado a cabo, en el que se recomendaba apostar por la plantación de especies que consumieran menos agua.

Con todos estos condiciones, se decidió retirar el césped que había en este punto del barrio de Puerta de Cuartos, donde hasta ahora, a causa de ese problema de filtraciones, era necesaria una «atención especial». Así, se ha modificado el parterre de césped existente por una gravilla terrosa y piedra ornamental con una línea de rosales y otro espacio con la plantación de unos lauros que guardan sintonía visual con otros ya plantados en la carretera de Calera, en el entorno del barrio de Patrocinio.

Con el tiempo, en este nuevo punto se plantarán dos o tres árboles de especies también sostenibles. Sobre esta cuestión, el concejal subrayó que, por una parte, se ha buscado «reducir sustancialmente el consumo de agua» y, de otro lado, «el mantenimiento» que requiere este espacio natural. En relación a esto último, el edil recordó que el mantenimiento del césped requiere una corta continua y un cuidado especial, por lo que se ha sustituido «por una serie de especies que son bastante más resistentes, aguantan más el estrés hídrico y que están incluso mejor preparadas de cara a los contrastes térmicos que están siendo tan habituales ya no solamente en el invierno, sino sobre todo en verano».

De cara a la primavera, una vez que florezcan los rosales, este espacio se convertirá en una zona colorida, frente al actual «abuso de los parterres de césped». Se creará de esta manera una especie de «carta de colores» con los tonos terrosos de la gravilla, los verdes y rojos de los rosales, unido a las diferentes texturas. 

En función del resultado de esta experiencia piloto, desde el equipo de Gobierno están pensando en «ir dando pasos de cara al futuro, en una estrategia de mayor rango, para reconvertir espacios que requieren mucho agua y que a lo mejor desde el punto de vista visual se pueden mejorar con opciones de xerojardinería».

Ahorro de agua. Este tipo de plantación se basa en principios como un ahorro de agua, menor coste de mantenimiento, limpieza más sencilla, dotar espacios orientados a los Objetivos de Desarrollo Sostenible y crear contrastes cromáticos y texturas, además de jugar con volúmenes en la infraestructura verde.

El concejal confirmó que se trata de estrategias que ya se están aplicando en otras ciudades, y, de hecho, si bien esta de la calle Ciudad de Bron es la primera más integral, en Talavera hay algunas que van en esta misma línea, también situadas en el barrio de Puerta de Cuartos, como son el paseo de la avenida de Talavera de la Reyna del Perú y en la glorieta del Paseo del Cementerio, donde se plantaron rosales.

De la Llave quiso destacar que se trata de una iniciativa adoptada con el visto bueno de la Asociación de Vecinos 'Ruiz de Luna' de Puerta de Cuartos, a la que se trasladó desde el Ayuntamiento para conocer su opinión. «Les pareció bien porque había sobre todo una cuestión técnica, que eran esas infiltraciones que suponían un problema también porque afectaban al pavimento», entre otros, explicó el concejal.

Para Sergio De la Llave, acciones de estas características son «el camino a seguir», si bien en cualquier caso quiso dejar claro que no se trata de eliminar todo el césped que existe en la ciudad, sino de «combinar» ambas opciones.