Dimisión del seleccionador del equipo de kumite

EFE/ R. J. F.
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Ángel Arenas deja el cargo después de que el equipo renunciara a luchar por el bronce europeo, un gesto que «ha deshonrado al deporte español»

El equipo de kumite masculino, con el talaverano Raúl Cuerva, en el Europeo de Croacia. - Foto: RFEK

La Real Federación Española de Kárate (RFEK) confirmó que el seleccionador masculino de kumite, Ángel Arenas, ha presentado su dimisión una semana después de que el equipo renunciara a competir por el bronce en el Europeo de Croacia, gesto, que en su opinión «ha deshonrado al deporte español».

Según informó la RFEK, Arenas comunicó su decisión en una carta remitida al organismo, en la que se refiere a la repercusión para el kárate y todo el deporte español de los hechos ocurridos el pasado día 23 en Porec y a su condición de «primera persona responsable de la elección de este grupo de personas que han deshonrado y mancillado el honor del deporte Español».

«El resultado y la imagen que han dado de nuestro país en este campeonato no ha podido ser más bochornosa. El responsable soy yo, y, con esa firmeza tomo esta decisión», añade en su misiva.

La RFEK en un comunicado agradeció a Ángel Arenas su trabajo al frente del equipo nacional absoluto así como su trayectoria en calidad de técnico y señaló que «su actitud siempre ha sido profesional con los competidores y con la federación».

«En cuanto a la situación de los deportistas implicados, la RFEK y D.A. respeta las decisiones de los órganos disciplinarios federativos. El procedimiento debe mantenerse en márgenes del derecho y mostramos nuestro absoluto respeto a la protección de datos y a los derechos de todas las partes. La institución de la RFEK y D.A: asegura la continuidad de nuestro deporte y hace un llamamiento humilde a la unidad y el respeto de toda nuestra federación», añade.

Hay que recordar que los integrantes del equipo de kumite, entre los que se encuentra el talaverano Raúl Cuerva, decidió no luchar por el bronce europeo al denunciar «humillaciones, insultos, ataques a nuestra persona y familiares ajenos al entorno deportivo».