Højbjerg, motor 'vikingo' y fanático del mate

Antxo Lamela (EFE)
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El centrocampista del Tottenham Hotspur está cuajando un sensacional torneo con su selección, que sueña con la finalísima

El jugador nórdico está muy valorado en la Premier League. - Foto: Peter Dejong / POOL

Pierre-Emile Højbjerg es el motor de Dinamarca, que sueña con llegar a la final. Insustituible en el centro de campo, clave en la presión y segundo máximo asistente en lo que va de torneo. Un fijo en la selección danesa el último año después de asentarse en el fútbol británico, donde ha desarrollado otra afición: el mate.

Cuando el futbolista danés baja del autobús de la selección para entrar al estadio, es habitual verlo con un termo de mate bajo el brazo y una bombilla. «Empecé hace tres años, cuando estaba en el Southampton», confesó recientemente el jugador, quien tomó la costumbre de varios compañeros del Cono Sur que tuvo en el club inglés.

Con la llegada de Hjulmand hace un año al puesto de seleccionador, Højbjerg, de 25 años, se ha asentado como titular. Lo mismo en el Tottenham, donde fue el jugador de la Premier con más minutos. 

Su gran torneo supone la confirmación de un jugador que tuvo un comienzo fulgurante hace ocho años, pero que luego ha vivido momentos difíciles.

Captado por el Bayern de Múnich a los 17 años para sus categorías inferiores, pronto debutó con el primer equipo. Pero un año después, su vida pareció desmoronarse: primero, una lesión importante en el pie; a las tres semanas, su padre fue diagnosticado con un cáncer de estómago.

Højbjerg se derrumbó. Pero el Bayern le ayudó a trasladar a su padre a Alemania y a conseguir un tratamiento. Y le dio apoyo su entrenador, Pep Guardiola.

«Me llamó y me dijo que lo sentía mucho. Nos sentamos a hablar. Y, de repente, me eché a llorar y le dije que tenía miedo, no sabía qué hacer». Guardiola le aconsejó que siguiera cerca de sus seres más queridos aunque le pudiese afectar en su trabajo. «Y entonces él empezó a llorar y no supo qué más decir».