En el inicio de la Cuaresma, el arzobispo de Toledo, Francisco Cerro Chaves, ha dirigido una carta pastoral a todas las hermandades y cofradías diocesanas, titulada Siguiendo sus huellas. En la carta también se incluye un Via Crucis y un Via Lucis para que puedan celebrarse durante los tiempos litúrgicos de la Cuaresma y la Pascua, con las meditaciones que él mismo propone.
La carta pastoral incide en los pilares fundamentales de la vida de las cofradías: la formación, el culto y la caridad; analiza el proceso de renovación de los estatutos de estas asociaciones de fieles; invita a incrementar el espíritu de comunión eclesial con la Archidiócesis y con la Iglesia universal; dirige la mirada a la procesión de las procesiones, el Corpus Christi; y recuerda el Año de San José, al que el Sr. Arzobispo ha dedicado también una carta específica.
En estos días, la carta llegará a las parroquias y a todas las hermandades y cofradías de la Archidiócesis. Con ello, don Francisco Cerro anima a los sacerdotes y diocesanos a seguir trabajando en este amplio sector del apostolado seglar, intensificando su misión en la Iglesia. Cuando todavía estamos sufriendo las consecuencias de la pandemia de la Covid-19, el trabajo de las hermandades diocesanas está siendo “la tabla de salvación de muchísimas familias” y un signo de esperanza para la Iglesia.