El estado de los neumáticos, el funcionamiento de la batería y los niveles de líquidos son los principales puntos a revisar en un vehículo tras el regreso de las vacaciones y la vuelta a la rutina.

Las altas temperaturas, el sol constante sobre el vehículo, la arena, el salitre propio de las zonas de playa, los desplazamientos por zonas arenosas y los largos kilómetros recorridos hace que el vehículo sufra las consecuencias.

Por estos motivos, hay ciertos elementos que deben ser revisados en profundidad antes de emprender el viaje de regreso o una vez ya instlados en casa de nuevo.

Neumáticos, batería y niveles, los puntos clave a revisarEn primer lugar, el calor afecta directamente al estado y funcionamiento de la batería. Además, durante las vacaciones el coche suele estar mucho tiempo estacionado por lo que se debe arrancar el vehículo y comprobar que lo hace sin forzar, de una manera completamente normal.

Al igual que la batería, los neumáticos también se ven afectados por el sol, el calor y, sobretodo, cuando el asfalto está muy caliente. «Todo ello puede provocar un desgaste prematuro. También podemos encontrarnos con el caso de que estén mucho tiempo estacionados, pudiendo deformarse ya que una sola zona del neumático soporta todo el peso del vehículo», subrayan los especialistas. De ahí que se recomiende revisar la presión, el dibujo y que no tenga cortes ni bultos.

La tercera recomendación antes de emprender el viaje de vuelta a casa es la revisión de los niveles de líquido refrigerante, aceite y limpiaparabrisas.

Neumáticos, batería y niveles, los puntos clave a revisarEsta acción se puede hacer extensiva al sistema eléctrico, que se puede ver dañado por otros asuntos como la humedad y aparecer problemas con el alternador o el motor de arranque. Esto mismo también puede ocurrir con la correa o los latiguillos de los frenos, que se deterioran más rápido con la humedad.

Por último, siempre se recomienda llevar a cabo una limpieza en profundidad, puesto que tanto el salitre como la arena, sobre todo si el coche ha estado estacionado durante mucho tiempo al aire libre en vez de a cubierto, también hacen mella en la limpieza interior y exterior del vehículo.